Técnicas del Románico para pequeños artistas del siglo XXI

En los inicios del segundo milenio, los maestros del Taller de la Ribagorça trabajaban en los templos románicos de La Vall de Boí adornando con motivos religiosos los frontales de los altares con la técnica de pintura al tremp d’ou. Se trata de un método –conocido también como al temple– en el que se usa yema de huevo como aglutinante en la disolución de pigmento y agua.

Ayer, unos 1.000 años después, una veintena de niños y niñas les tomaron el relevo en el mismo valle pirenaico para dar forma a sus propias creaciones en el marco del taller navideño Pintem com fa mil anys!, que llenó al completo el aforo del Centre del Romànic de La Vall de Boí en Erill la Vall. Los pequeños artesanos, de entre 5 y 6 años de edad, se sintieron como verdaderos pintores y dieron rienda suelta a su imaginación para plasmar, como hace el mismo románico, historias llenas de vida, a la vez que experimentaron con una técnica pictórica milenaria que se usó por toda Europa. “La mayoría de los participantes se han inclinado por pintar iglesias, aunque otros se han atrevido con flores, estrellas y figuras de temática navideña”, explicó ayer Fabienne Laclare, trabajadora del Centre del Romànic de la Vall de Boí y encargada de impartir la actividad junto a la restauradora invitada Ares Pérez.

La pintura al tremp d’ou es una técnica tradicional que se usó en las iglesias románicas de La Vall de Boí “sobre todo para decorar frontales de altares, aunque también para hacer pequeños retoques a los populares frescos”, subrayó Laclare.

Nuevo ‘mapping’ en Sant Joan de Boí durante 2020 La iglesia de Sant Joan de Boí se unirá a Sant Climent de Taüll y se convertirá en el segundo templo románico de la Ribagorça en proyectar un mapping. “Está previsto que la actuación termine en 2020”, explicó ayer la alcaldesa de La Vall de Boí, Sònia Bruguera. El proyecto se encuentra ahora en manos de “arquitectos y museógrafos” para que ambas partes acaben de pulir los detalles técnicos, añadió.