Premio Nacional a la innovación y tradición teatral de La Baldufa

La compañía teatral leridana La Baldufa fue galardonada ayer con el Premio Nacional de Artes Escénicas para la Infancia y la Juventud 2020 por su “permanente compromiso tanto con la innovación escénica más transgresora como con la tradición teatral y circense”. Así lo destacó el jurado de este premio otorgado por el ministerio de Cultura y dotado con 30.000 euros, que añadió que La Baldufa logra “crear universos híbridos de gran riqueza poética visual”. Se trata de la primera compañía catalana en ganar esta categoría del Premio Nacional de Teatro desde que comenzó a otorgarse, en 2009. Enric Blasi, uno de los tres fundadores de la Baldufa hace 24 años –junto a Carles Pijuan y Emiliano Pardo–, se mostró ayer gratamente sorprendido por “un premio de los gordos”. “Nos ha pillado por sorpresa absoluta, una noticia inesperada que nos ha provocado un ‘subidón’ total”, exclamó el actor, que no paró de recibir llamadas y mensajes de felicitación, entre ellos del propio alcalde de Lleida, Miquel Pueyo. Blasi agradeció la concesión de un galardón que “nos da más prestigio, nos ayuda a posicionarnos como marca y reconoce una trayectoria de casi veinticinco años”, en la que la compañía ha estrenado una docena de espectáculos, como Embolic a la granja, El príncep feliç, Pinocchio, Safari o Bye, bye, Confetti. Tampoco se olvidó de “lo bien que vendrán los 30.000 euros”, sobre todo en el año tan difícil por la pandemia. “Ahora tenemos muchas ganas de que vuelva una temporada más normal”, comentó. En julio, la compañía tuvo que anular el festival Esbaiola’t en Esterri d’Àneu, que ahora se ha retomado en un formato más íntimo, “sobre todo para que el público del Pallars pueda disfrutar del teatro perdido en verano”. Además, están preparando su nueva obra para los más pequeños, La faula de l’esquirol, que presentarán en quince días en la Fira Mediterrània de Manresa. Blasi recordó que la primera edición de este premio distinguió a los Titiriteros de Binéfar: “Son nuestros ‘tíos’, nos apadrinaron y aprendimos con ellos la búsqueda de una estética y de un discurso con fondo social”.