El legado de Ramon Molins

El actor y director leridano Ramon Molins lleva más de tres décadas actuando frente al público con la compañía Zum Zum Teatre, pero “ahora me ha dado un poco de vergüencilla estar solo en el escenario, incluso saludar al final de la obra”. Fue la sensación que experimentó el pasado fin de semana en el Auditori de Manresa, en el marco de la Fira Mediterrània, donde estrenó su nuevo proyecto, El Testament, un reto más en su trayectoria teatral. Una obra que nació en pleno confinamiento por la pandemia.

“La primera semana en la que nos encerraron en casa estuve dándole vueltas a lo que había hablado unos días antes con el dramaturgo vasco Jokin Oregui, una conversación de bar sobre la vida y la muerte”, recordó ayer el dramaturgo leridano. Y entonces le vino a la cabeza la idea del testamento, del legado. “¿Hay que morirse para dejar algo en herencia? He teatralizado mi respuesta en un espectáculo de una hora, en el que me ‘desnudo’ un poco frente al público”, explicó Molins sobre un montaje basado en su propia vida real, un testamento en vida lleno de recuerdos e identidades.

Su primer monólogo, en una dramaturgia con protagonismo también para el teatro de objetos, disfrutando de la colaboración de todo un referente en España en este género, los responsables de la compañía El Patio de Logroño, premiados en certámenes como el Feten de Gijón o la Fira de Titelles de Lleida. “Es un monólogo para adultos, en el que se ríe mucho pero en el que también hay lágrimas, como la vida misma”, señaló el actor y director leridano sobre este nuevo paso adelante profesional. “Hacer teatro es como andar con zancos, si paras te caes.

Siempre hay que buscar retos nuevos que te pongan las pilas”, concluyó.

“Aún da miedo programar teatro ‘adulto’ también para niños”

Con Zum Zum, Molins tiene una máxima: “Hacer teatro para adultos a partir de 4 años”. “Los niños no son tontos, están bien equipados para entender el teatro, emocionarse y disfrutar”, asegura este ‘especialista’ en teatro familiar.

“Pero cuesta mucho romper el techo de cristal del teatro infantil”, lamenta. Molins critica que “el mercado sigue pidiendo ‘azúcar’; a diferencia del cine o la TV, a los programadores de teatro les da miedo las propuestas más ‘adultas’ para niños”. El Testament se estrenará en Lleida en el Teatre de l’Escorxador en diciembre.