Marc aún no se ve campeón

Marc Màrquez aseguró ayer en el circuito japonés de Motegi que sus opciones de ser campeón este domingo en casa de Honda es casi imposible, así que su objetivo es sumar “el máximo de puntos posibles”. “No será aquí. Al 99 por ciento estoy seguro. Aunque no lo creáis, no pasa por mi cabeza. Aquí tenemos que ir con la mentalidad de construir. Y eso quiere decir sumar puntos”, dijo.

Reconoció no saber cuáles eran las cuentas para proclamarse campeón. “Sé que tengo que ganar, pero no sé los otros que es lo que tienen que hacer. Supongo que con 52 puntos es..., no me la sé, no me la sé (sonrisas), pero tengo que ganar seguro si quiero ser campeón, pero no creo que pase”, dijo.

“El año pasado aprendí cosas. Aprendí que dependes de ti mismo en la pista, fuera de ella no”

“Tampoco quiero ni quitarme aspiraciones ni ponerme mucha presión, pero al final sabemos que aquí, en este circuito, de los que quedan, es en donde sufriremos más, pero también teníamos que sufrir en Misano y luego no fue tanto, así que esto me da esperanzas de estar en el podio el domingo”, comentó el piloto de Repsol Honda.

Marc es consciente de que las Yamaha son más rápidas en Motegi. “Sabemos que los dos pilotos Yamaha han ido los últimos años muy rápido, sobre todo Jorge, pero también Valentino. Si fuese en Aragón diría que intentaremos apretar, pero este es un circuito que ya veremos cómo estamos el viernes y el sábado”, explicó.

Sobre las causas de por qué la Honda no es tan competitiva en Motegi como las Yamaha afirmó: “Es difícil de decir porque aquí Honda da muchas vueltas. Hay muchas aceleraciones, que es el punto débil que hemos tenido este año. Los otros años, en seco, sí he podido acabar por delante de Dani, que siempre ha ido muy rápido. El pasado ganó, en una carrera en agua. Ojalá este año también pueda acabar delante de Dani”, indicó.

Una vez más Màrquez fue preguntado por las declaraciones de Valentino Rossi semanas atrás recordando lo que pasó la pasada temporada y una vez más el líder del Mundial fue comedido y no quiso entrar al trapo. “El año pasado aprendí cosas. Aprendí que dependes de ti mismo en la pista y que fuera de ella no. Hay muchos factores y al final sé que es una guerra que no me conviene en la situación en que estamos ahora, ni tampoco quiero entrar porque al final no me aporta nada”, concluyó el piloto de Cervera.