Frenazo a la racha

El ICG Software Lleida vio truncada ayer su buena racha con una inesperada derrota por 3-4 frente a un Voltregà que venía herido y que se reivindicó en el Onze de Setembre. Los leridanos, muy precipitados y ansiosos, sobre todo cuando fueron por detrás en el marcador, tampoco estuvieron acertados en las jugadas a bola parada. Y es que fallaron la friolera de tres penaltis –en uno de ellos Andreu Tomàs logró enmendar su error en el rechace posterior– y tres faltas directas, todas ellas de un Darío Giménez que ayer tuvo la suerte de espaldas.

El partido, no obstante, se puso de cara para los listados al poco de iniciarse. Un contragolpe comandado por Xixi Creus era culminado con un sutil toque de stick por Andreu Tomàs para hacer subir el 1-0. Todo parecía encarado, pero el Voltregà, como es habitual, no se rindió y apostó por su mejor arma, el contragolpe. Lluís Tomàs evitó con un par de paradas el empate, que llegaría en un disparo de Vargas que más parecía un pase y que sorprendió al meta leridano, que estaba tapado por sus compañeros (1-1).

Albert Folguera dio entrada a Darío Giménez, que ayer tampoco pudo descansar, y el argentino tuvo su primera gran ocasión en un penalti forzado por Creus. Fue una jugada clave, ya que el lanzamiento lo detuvo Roca, pero este se había movido antes de lanzar. Pese a las protestas, los árbitros no lo hicieron repetir. Esa jugada pareció descentrar a los de Folguera, que permitieron infinidad de contras del rival. En dos de ellas, el Voltregà le dio la vuelta al marcador situando un preocupante 1-3 al descanso.

Al poco de reanudarse el partido, Darío disparó al palo y en la jugada posterior, Candanedo veía la tarjeta azul y la consiguiente falta directa la aprovechaba López para situar el 1-4. El ICG estaba tocado, pero Giménez se reencontró con el gol un minuto después y relanzó las opciones de su equipo, que un minuto más tarde situaba el 3-4 al aprovechar Andreu Tomàs el rechace tras errar un penalti. Aún quedaban 20 minutos, pero el marcador ya no se movió. Ocasiones no le faltaron, en concreto dos faltas directas ejecutadas por Darío Giménez y un penalti de Andreu Tomàs, pero la bola no quiso entrar y el equipo listado rompió una racha de tres victorias, dos en la Liga y una en la Copa CERS.