Otro recital y más líderes

El Barça goleó al Betis (0-5) y salió más líder del Benito Villamarín, después de una segunda mitad en la que desató su fútbol y protagonizó un festival goleador con cinco tantos ante un rival que se desmoronó ante la superioridad azulgrana. Los de Ernesto Valverde aumentaron su margen sobre el Atlético de Madrid, a 11 puntos, y Valencia, a 14, mientras que mantuvo los 19 sobre el Real Madrid.

Tras una primera parte competida y entretenida, que acabó 0-0 y sin demasiadas ocasiones, el Barça destapó su fútbol y su efectividad y, con Messi excepcional y bien secundado por un ‘matador’ Luis Suárez, no dio opción a un Betis fallón en defensa y que se vio sometido por el vendaval de goles. El conjunto de Valverde comenzó algo dormido y ante la gran presión local estuvo incómodo durante los primeros 20 minutos, en los que el Betis, con Fabián al timón, salió decidido y a dar batalla. Impuso su mayor intensidad, con la rapidez de Durmisi y el exbarcelonista Tello y los movimientos de Joaquín y Sergio León. Así, las primeras opciones de gol fueron verdiblancas, con un zurdazo desde lejos de Guardado que se marchó fuera, a los 3 minutos, y un remate en semifallo de Joaquín, 8 minutos después, que salió alto tras un centro desde la izquierda de Durmisi. Sin embargo, el Barça empezó a tocar más el balón y a someter a su rival, con la fuerza de Sergi Roberto y André Gomes en las bandas y los movimientos siempre peligrosos de Messi y Luis Suárez, y las ocasiones empezaron a caer sucesivamente del lado azulgrana.

Jordi Alba lo intentó con un centro que paró en dos tiempos Adán, con apuros. Sergi Roberto, tras recortar en el área, remató ligeramente alto y, poco después Rakitic, lo probó con un disparo flojo y lejano. Aún así, fue Messi, a pase de Luis Suárez, el que tuvo la ocasión más clara en el minuto 31, pero estrelló su fortísimo tiro en el lateral de la red. Cerca del descanso se enfrió el juego. El Betis buscó tímidamente el gol en una contra de León o un tiro de Fabián, y en el Barça se lesionó Vermaelen, lo que forzó la reaparición de Umtiti.

En la reanudación cambió el guión, después de que los azulgranas hubieran estado desaparecidos en muchas fases y hubieran jugado a ráfagas ante la combatividad y las ganas de los béticos. Después de un remate de Fabián que detuvo Ter Stegen, el Barça ejerció una presión más alta. Esto, unido a que el sistema defensivo del Betis empezó a resquebrajarse, se tradujo en el 0-1 al filo de la hora de juego, cuando en una veloz llegada Rakitic batió en el mano a mano a Adán. Tras el gol, que despertó a los barcelonistas, el local Feddal reclamó sin éxito penalti por unas supuestas manos de un rival al cabecear un córner, pero los béticos, fallones atrás y con poca presencia ofensiva, ya se vieron subyugados por la supremacía de un Barça que empezó a funcionar. Con un fútbol más vivo y profundo, acosó la portería verdiblanca y pronto halló sus frutos. Cinco minutos después de abrir el marcador, Messi marcó el 0-2.Con el Betis desaparecido, absolutamente descompuesto tras haberse vaciado en una buena primera mitad, llegaron tres tantos más de los azulgranas, que controlaron a placer el juego. Luis Suárez logró el tercero, a centro de Rakitic, y tras el cuarto de Messi, mucho más entonado y que marcó en una gran jugada personal, el uruguayo también firmó su doblete de un disparo cruzado tras otra magnífica acción del argentino.