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El Barça tira la imbatibilidad

El delantero uruguayo, como el resto de sus comapañeros, acabó hincando la rodilla ante un Levante que salió con más ambición e intensidad que los azulgranas.

El delantero uruguayo, como el resto de sus comapañeros, acabó hincando la rodilla ante un Levante que salió con más ambición e intensidad que los azulgranas.EFE

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El Barça se dejó su condición de invicto esta temporada en la penúltima jornada de la Liga ante el Levante, sin Messi y con una fábrica de errores en defensa impropios de un campeón, que no reaccionó hasta verse 5-1 abajo, para rozar una remontada que no llegó. El descanso del ‘10’, una defensa inédita con Yerri Mina, Vermaelen y Semedo, y un centro del campo superado fueron demasiados contratiempos. En el Barça todo se aunó para poner en juego su racha histórica de 43 jornadas sin perder. Ninguna derrota esta temporada hasta que toparon los de Ernesto Valverde con un Levante que impuso su propio momento dulce.

Los errores en defensa, con un Mina frío junto con Vermaelen en la pareja de centrales, y un equipo partido por la mitad, permitieron la combinación y golpes de un Levante que celebró a lo grande su permanencia un año más en Primera. El primer gol llegó a los nueve minutos y lo firmó uno de los protagonistas de la noche, Boateng. El tanto dio mucha seguridad al Levante, que siguió con la misma intensidad ante un Barcelona descolocado que no podía sacudirse el ímpetu y la velocidad del equipo valenciano.

La intensidad local y el hecho de que el Barcelona quedase durante unos instantes con diez por lesión de Vermaelen llevó al Levante a conseguir el segundo tanto, también obra de Boateng, que, tras recibir un pase en la frontal del área, dribló a Ter Stegen y a Semedo para poner el 2-0 en el marcador. El Levante controlaba el partido ante un Barcelona que tuvo que recurrir a Piqué poco después de cumplirse la media hora de juego por la lesión de Vermaelen y que en la recta final fue ganando metros.

Así, Coutinho acortó distancias en el minuto 39 con un buen disparo que tocó en Roger y que descolocó a Oier. Pero la salida del Levante tras el descanso fue fulgurante y a los pocos segundos de reiniciarse el choque llegó el tercer tanto local y tres minutos después, el cuarto. Los de Paco López estaban desatados ante un Barça desbordado e irreconocible que estaba tirando por la borda la posibilidad de cerrar la Liga invicto. El Barça estaba KO y se convirtió en un juguete en manos del infalible Levante de Paco López, que hizo el quinto en una nueva contra que culminó Bardhi, prácticamente solo ante Ter Stegen.

En la fiesta del gol en la que se convirtió el partido volvió a participar Coutinho al aprovechar en el minuto 59 un rechace tras un primer disparo de Dembélé, y en el 64 con un disparo desde la frontal que llevó el 5-3 al marcador. Los goles metieron al Barça en un partido del que parecía totalmente fuera con el 5-1. El equipo de Ernesto Valverde ganó metros, metió al Levante en su campo y a veinte minutos del final llegó el cuarto del Barça, obra de Luis Suárez de penalti.

El Barça pasó en poco más de diez minutos de estar liquidado a meterse de lleno en el partido con tres goles y con tiempo por delante para defender la condición de invicto a un jornada para la conclusión del campeonato. Luis Suárez la tuvo de cabeza y Luna casi le hace el favor al rival en propia puerta. En los diez últimos minutos, el partido recobró su máxima intensidad, pero el marcador ya no se movió.

El delantero uruguayo, como el resto de sus comapañeros, acabó hincando la rodilla ante un Levante que salió con más ambición e intensidad que los azulgranas.

El delantero uruguayo, como el resto de sus comapañeros, acabó hincando la rodilla ante un Levante que salió con más ambición e intensidad que los azulgranas.EFE

El delantero uruguayo, como el resto de sus comapañeros, acabó hincando la rodilla ante un Levante que salió con más ambición e intensidad que los azulgranas.

El delantero uruguayo, como el resto de sus comapañeros, acabó hincando la rodilla ante un Levante que salió con más ambición e intensidad que los azulgranas.EFE

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