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© Jugadores del Vila-sana celebren un gol en un partit d'aquesta temporada.
PAU CARAZOA falta de dos jornadas para que finalice la Liga en la OK Liga femenina y con la permanencia asegurada desde hace tiempo, el Vila-sana ya ha empezado a moverse para fortalecer el equipo y, tras una primera campaña en la máxima categoría más que notable, el club del Pla d'Urgell ya se marca nuevos objetivos. La temporada del debut en la OK Liga ha sido histórica, puesto que a la permanencia se unió la clasificación para la Copa de la Reina, en la que el equipo llegó a semifinales. Pero el club, que como ya informó SEGRE, ha incorporado a Lluís Rodero como director deportivo, se ha fijado como nuevo reto lograr la clasificación para una competición europea, para lo que prepara un proyecto a tres años.
El club dará dos bajas a final de temporada. No continuarán la internacional portuguesa Marta Vieira ni la asturiana Silvia Cadrecha, mientras que las otras siete jugadoras, el "núcleo duro", ya está renovado. Se trata de Anna Ferrer, Maria Porta, Victòria Porta, Laura Porta, Mar Franci, Laia Cid y Anna Carazo. También está asegurada la continudad del técnico, Jordi Capdevila, que es el que llevó al equipo hasta la élite.
El objetivo es fichar a tres jugadoras que refuercen al equipo. Los contactos están muy avanzados en los tres casos, aunque el Vila-sana no anunciará los nombre de los fichajes hasta que acabe la temporada, puesto que las tres compiten con sus actuales clubes. También incorporará jóvenes a su Masía, que pasará de 7 a 12 inquilinas.
El Vila-sana ha puesto en marcha una iniciativa novedosa que tiene un doble objetivo, conseguir financiación para el club y dar la posibilidad a socios y aficionados de participar en un sorteo que puede suponen la entrega de 500 coches, para lo que el club ha cerrado un acuerdo con Autansa 3.000, el concesionario Renault en Lleida.
