Godín salva al Atlético

Un cabezazo en el minuto 91 de Diego Godín, lesionado, literalmente cojo, desde mucho antes, situado de delantero centro, culminó una remontada imprevisible del Atlético de Madrid frente al Athletic, dos veces por delante en el marcador y mejor durante muchos tramos del choque.

Un golpe durísimo, que necesitó la revisión del VAR antes de la concesión del gol –anulado inicialmente–, para el conjunto bilbaíno, que iguala su peor racha sin ganar en Primera, once duelos, y un final apoteósico para el equipo madrileño.

El Atlético se encontró con un panorama inédito hasta ahora en esta Liga: un gol en contra en el primer tiempo. Era el minuto 36. No había sucedido mucho, apenas nada, en todo el tramo anterior, con un Athletic bien armado en su defensa, compacto, sin permitir ni un solo espacio para el juego entre líneas local. El tanto fue un centro al área que remató San José, lo tocó Oblak, rebotó en el palo y lo empujó Williams (0-1). El partido era del Athletic y el Atlético, que no tenía ocasiones, se salvó del 0-2 gracias a Oblak.

Sin embargo, llegó el empate de los de Simeone, que no habían probado a Herrerín en una hora de partido, con un tremendo derechazo desde lejos de Thomas Partey (1-1). Pero enseguida se repusieron los bilbaínos, con el 1-2 al contragolpe de Williams, inalcanzable para Godín –lesionado en esta acción– desde el pase de Muniaín.

Dos ráfagas en tres minutos que dejaron todo igual, con el Atlético a remolque. A diez minutos del final, apareció inesperadamente Rodrigo para empatar de nuevo para el Atlético, al cabecear un córner en la segunda ocasión del Atlético. No acabó ahí. Los colchoneros encontraron el gol del triunfo en Godín, cojo y de cabeza, siendo primero anulado por fuera de juego y concedido por el VAR.