Punto de oro del Lleida Llista en el Palau

El Lleida Llista a punto estuvo de asaltar el Palau Blaugrana, del que salió con un valiosísimo punto (3-3) que le permite llegar a la última jornada con opciones de ser cabeza de serie en la Copa del Rey. Los de Albert Folguera, pese a su falta de acierto en la primera mitad, remontaron un 2-0 en la segunda y llegaron a dominar por 2-3 a solo seis minutos del final.

Los primeros minutos fueron de tanteo hasta que el Barça acertó a marcar en su primera aproximación. Fue un disparo lejano de Gual que Panadero, muy listo, acertó a desviar lo suficiente para confundir a Lluís Tomàs y batirlo por arriba. El gol no hizo mella en los listados, que reaccionaron con dos llegadas que Sergi Fernández desbarató. De hecho, el meta azulgana se convertiría en una pesadilla para el Llista, ya que en poco más de un minuto salvaría de nuevo a los suyos de dos goles casi seguros.

A los siete minutos, Andreu Tomàs, tras un gran servicio de Roberto Di Benedetto, levantó la bola ante Fernández y este le adivinó la intención, y un minuto después, el azulgana salvaba con su guarda y casi sobre la línea de gol otro remate del goleador pallarés, tras una magnífica asistencia de Oruste por debajo del cuerpo del portero. El Llista no cejó en su empeño y Candanedo la volvió a tener, pero otra vez el meta barcelonista evitó el empate. Por entonces, el Llista ya acumulaba ocho faltas por solo dos del Barça, que en su segunda llegada clara volvía a batir a Lluís Tomàs. Esta vez fue una jugada personal de Alabart, que marcó de disparo cruzado.

El Barça había aprovechado las dos ocasiones claras que había tenido y el Llista seguía a cero pese a tener, al menos, tres de muy claras. Los de Albert Folguera volvieron a la carga y Bruno Di Benedetto, que regresaba tras su lesión, tuvo sendas ocasiones que acabaron desbaratadas por Fernández, que también se lució en un disparo de Candanedo, primero, y en el rechace posterior que tampoco aprovechó Oruste. Poco después, Roberto enviaba la bola al palo y en el último suspiro, Panadero perdonaba el tercero.

Parecía que el Barça, por efectividad, acabaría llevándose el partido, pero todo dio un vuelco en la segunda mitad. Después de un par de avisos, Oruste recoge un rechace a media pista y lanza el contraataque para que Xixi Creus, muy hábil, bata por fin a Sergi Fernández (2-1, m.34). El tanto espoleó a los listados, que cuatro minutos después empatarían en una gran triangulación, con asistencia final de Candanedo para que Bruno estableciera el 2-2.

El campeón de la CERS estaba tuteando a todo un campeón de Europa y dejó groggy a los azulgranas al anotar el tercero gracias a Candanedo, que recogió una genial asistencia de Creus. Faltaban aún nueve minutos y todo podía pasar. El Barça estaba contra las cuerdas y su técnico puso a todos sus titulares. A seis minutos del final, Pablo Álvarez metía sutilmente el stick, tras un servicio de Panadero, y volvía a restablecer la igualada. En ese momento se erigió la figura de Lluís Tomàs, que salvó el gol en dos ocasiones, la segunda con la ayuda del palo y el Llista acabó festejando, con merecimiento, un punto de oro.

Albert Folguera: “Empatar en el Palau tiene un mérito increíble” Albert Folguera era ayer un hombre feliz después del empate logrado en el Palau, que casi calificó como una victoria. “Empatar aquí tiene un mérito increíble. El equipo ha hecho una segunda mitad brutal. Hemos tenido la victoria muy cerca, pero no podemos lamentarnos porque es un grandísimo resultado”, apuntó el técnico, que destacó el poder de reacción de sus hombres. “Tenía miedo de que en la segunda parte nos fuéramos del partido, encajáramos el tercer gol y acabáramos recibiendo siete, pero el equipo ha demostrado una gran madurez. Ahora toca ganar en Vendrell, porque si no, no habrá servido de nada”, avisó Folguera.