Las motos vuelven a Bellpuig

El rugir de las motos volvió a resonar ayer en el Circuit de Catalunya de Bellpuig después de más de cuatro meses sin actividad por culpa de la crisis sanitaria del coronavirus. “Había ganas, tanto por nuestra parte como por la de los pilotos. Nunca habíamos estado tanto tiempo sin tener actividad en el circuito. La echábamos a faltar”, afirmaba ayer Lluís Capdevila, presidente del Moto Club Segre y responsable de la gestión del trazado urgelense. Un total de 53 pilotos, de los 59 que se habían inscrito, se acercaron a Montperler para tomar parte en la primera tanda de entrenamientos postcoronavirus y última antes del parón estival, ya que hasta septiembre no se volverá a retomar la actividad, entonces ya con las carreras. Los pilotos tuvieron que seguir un estricto protocolo, manteniendo la distancia de seguridad, la higiene de manos al entrar en el recinto y llevar mascarilla cuando no tenían el casco puesto.

En Bellpuig están previstas dos pruebas este año, las dos primeras postconfinamiento que organizará el Moto Club Segre. Serán el Provincial de motocross, fijado para el 27 de septiembre, y el Campeonato de Catalunya de la misma especialidad, previsto para el 11 de octubre. La entidad leridana tiene programadas otras seis carreras hasta final de año en los otros circuitos que gestiona. El Off Park La Clua albergará las Copas Catalanas de Enduret y Enduradas el 18 y 25 de octubre, respectivamente; El Bosquet de Ponts acogerá el Provincial de motocross el 6 de diciembre y el Catalán absoluto dos días después, el día 8, mientras que Rufea cerrará el calendario motociclista el 20 de diciembre con la última cita del Campeonato Provincial de motocross.