Tributo con goles

El Barça rindió ayer en el Camp Nou el mejor homenaje posible a Maradona, exjugador azulgrana que falleció el miércoles, al golear a Osasuna (4-0) y confirmar que ya carbura y que quiere retomar el pulso por la competición doméstica.

Braithwaite, con el 1-0 azulgrana a la media hora tras firmar un doblete en Champions, desbloqueó la resistencia navarra y Griezmann, despojado de la presión del ‘9’, se unió a la fiesta antes del descanso con una gran volea desde fuera del área. El francés también asistió a Coutinho para incrementar la cuenta a la vuelta de vestuarios. Messi cerró la goleada con un homenaje al ‘10’, despojándose de su camiseta y mostrando la de Newell’s (ver desglose).

Ni la línea de cinco defensas con la que Arrasate planteó el duelo frenó el empuje azulgrana. Koeman alineó a su equipo más ofensivo, con un doble pivote integrado por De Jong y Pedri, y con Coutinho, Griezmann, Leo Messi y Braithwaite llevando el peligro al área de Herrera. Ya a los diez minutos, Unai García tuvo que sacar bajo palos un disparo de Coutinho a puerta vacía y Griezmann, suelto con un ‘9’ de referencia por delante, avisó en un par de ocasiones, a las que respondió Budimir con un remate que se fue por encima del larguero.

La lesión de Jony supuso el primer contratiempo para el cuadro visitante, que la temporada pasada había sido capaz de asaltar el Camp Nou, pero que ayer se encontró con la losa del tanto de Braithwaite a la media hora (1-0). El danés recogió el balón tras dos paradas de Herrera y no perdonó en una jugada revisada y confirmada por el VAR. Precisamente, el videoarbitraje anuló también un tanto a los visitantes por fuera de juego de Oier, y solo un par de minutos después Griezmann puso el duelo más cuesta abajo para el Barça al cazar un rechace en la frontal y enganchar una espectacular volea para ampliar la ventaja antes del descanso (2-0).

Al primer toque y generando una gran variedad de ocasiones, los de Koeman se gustaron y no tardaron en ampliar su renta tras el paso por vestuarios, en una ocasión en la que Coutinho aprovechó un pase perfecto de Griezmann para quedarse solo ante Herrera (3-0). Otro francés, Dembélé, que ingresó a los 61 minutos en un triple cambio del técnico azulgrana, quiso unirse al festival goleador del ataque del Barça, pero el árbitro anuló su tanto por fuera de juego de Trincao, el autor del pase filtrado al ariete galo. No podía ser otro. Leo Messi cerró el homenaje al que fuera su seleccionador en el Mundial de Sudáfrica. Usó un remate desde la frontal ajustado al palo para poner el definitivo 4-0, a la vez que se quitaba la camiseta para mostrar otra de Newell’s.

Con la goleada de ayer frente al Osasuna, el Barça olvidó la última derrota en el Wanda Metropolitano frente al Atlético (1-0) y aprovechó la derrota del Madrid el sábado ante el Alavés (1-2) para recortar distancias en una Liga para la que todavía tiene que mantener la regularidad y sumar de tres en tres.