Italia empieza arrollando

Italia abrió ayer la Eurocopa con un contundente triunfo (0-3) ante Turquía, una prestación autoritaria que decidieron un gol en propia meta de Demiral y las dianas de Immobile e Insigne. El equipo de Roberto Mancini, que regresaba a una gran cita internacional tras su ausencia en el Mundial de Rusia 2018, se regaló una goleada y una gran solidez defensiva.

Acabó triunfando la técnica de Italia frente al poderío defensivo turco, aunque los hombres de Senol Gunes fueron capaces de cerrar bien los espacios y dificultar el trabajo de los azzurri, que llegaban tras una fase de clasificación inmaculada, con 10 victorias en 10 partidos. Los hombres de Mancini crearon un buen volumen de oportunidades, con combinaciones de alta calidad, como la triangulación que liberó un remate de Insigne, que acabó fuera.

También con buenas acciones a balón parado, como la que terminó con un cabezazo de Chiellini parado por el meta Cakir. Pero la igualdad siguió en el marcador al descanso, pese a que Turquía arriesgara por un posible penalti por unas manos de Celik que el colegiado decidió no pitar.

Tuvo que ser un desafortunado desvío de Demiral, defensa de la Juventus, al comienzo de la segunda mitad, el que rompió la igualdad en el choque del Olímpico e inauguró la cuenta goleadora de la Eurocopa (0-1).

Italia siguió apretando en busca del segundo tanto y el premio le llegó en el minuto 66, por medio de Immobile (0-2). A partir de entonces, Italia pudo controlar los ritmos, mover el balón y esperar el momento correcto para culminar su gran noche. Ese momento llegó en el minuto 80, cuando Immobile ofreció a Insigne un perfecto balón para que el delantero napolitano fulminara al meta con la pierna derecha (0-3). Van 9 victorias consecutivas, todas sin recibir un gol. Un empuje importante para llegar a la cita con Suiza del miércoles con plena confianza.