Un nuevo revés del Barça

El Barcelona sigue sumido en una crisis de resultados después de empatar ayer 2-2 ante Osasuna, en un partido en el que ganaba 1-2 tras el estreno goleador de Nico y Abde, pero en el que encajó un tanto de Chimy Ávila en el minuto 86 que le privó de la victoria. Otro revés para los de Xavi Hernández, que no están para alardes, pero que parecían regresar a Barcelona con una necesaria victoria, tras el 1-2 marcado por Abde, en una acción polémica ya que los locales reclamaron un penalti de Busquets en el otro área en la acción previa. Era la segunda vez que se ponía por delante el conjunto visitante, pero Osasuna se permitió pocos minutos de relajación y terminó sumando un punto, restándole dos al Barça.El equipo azulgrana, que venía de una derrota ante el Betis y de quedarse fuera de la Liga de Campeones el miércoles, sigue lejos de la zona europea y se llevó otro revés en medio de muchas dudas.

Por mucho que quiera Xavi dar un vuelco a la situación, a este Barça le toca sufrir en cada partido.La presión de Osasuna complicó a un Barça con escasos recursos, aferrado al talento de los jóvenes a los que se encomienda. Abde en banda izquierda quiso encarar y faltaron ayudas. Luuk de Jong, ante la baja de su compatriota Memphis, no tuvo un remate en todo el partido y al Barça le costó un mundo progresar.

Ni siquiera le valió de mucho al equipo de Xavi el gol entre Gavi y Nico (0-1, 12’).La dupla que parece salvarse del malestar del aficionado tras el último palo ante el Bayern guisó el 0-1 en un pase medido al desmarque, que Nico entrando desde segunda línea hizo perfecto. La alegría no le duró mucho al Barça. Apenas dos minutos después Rubén García remató solo de cabeza en el punto de penalti (1-1).

De nuevo le tocó sufrir a un Barça que apenas podía jugar en campo contrario y que no creaba ocasiones. Dembélé casi ni entraba en juego. La reacción inmediata dio a Osasuna más moral para el desgaste en la presión.El inicio de la segunda parte sonrió al Barça y frustró a los locales en la protesta a Martínez Munuera.

De una posible mano de Busquets en su área, la jugada terminó en la contraria con el 1-2 de Abde. La contra del gol azulgrana comenzó en un despeje de Gavi que topó en la mano del capitán del Barça, con el árbitro muy cerca. Siguió la jugada y Dembélé desbordó para el centro que terminó en el segundo palo.El Barça mantuvo esta vez la renta rondando la sentencia con la mejoría de Dembélé.

Entre el palo anímico del gol y el desgaste de la presión hasta ese momento, Osasuna perdió mordiente. Pero Arrasate movió el banquillo de golpe y los locales recuperaron el ímpetu para el tramo final. Budimir y Chimy Ávila fueron mucha amenaza para un Barça que tampoco defiende bien. En el desgaste defensivo, Dembélé pidió el cambio, y en un balón rifado de saque de esquina Chimy anotó el definitivo 2-2 que mantiene al Barça en estado depresivo.