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Aragón agilizará los trámites para BonÀrea Agrupa

Declara su inversión de 400 millones en Épila de interés autonómico|| Impulso preferente de las administraciones

Momento de la firma del presidente aragonés y el de BonÀrea.

Momento de la firma del presidente aragonés y el de BonÀrea.

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El gobierno de Aragón ha declarado de interés autonómico la inversión de 400 millones de euros anunciada por BonÀrea Agrupa (nueva denominación de la CAG de Guissona) en la localidad zaragozana de Épila para la puesta en marcha de un gran complejo cárnico. La decisión fue adoptada ayer por el ejecutivo que lidera Javier Lambán. Esta declaración supone que todos los trámites administrativos vinculados a la ejecución y desarrollo del proyecto tendrán un impulso preferente y urgente por parte de las administraciones públicas aragonesas, lo que incluye el ayuntamiento, reduciéndose a la mitad los plazos ordinarios de trámite en los procedimientos administrativos previstos en la normativa aragonesa, salvo los relativos a la presentación de solicitudes y recursos, además de otros efectos de fomento de la inversión.

El ejecutivo aragonés recordó que el proyecto prevé la creación, cuando el nuevo complejo cárnico esté a pleno rendimiento, de 4.000 puestos de trabajo. En esta línea, apuntó que el proyecto de BonÀrea, además, confluye con las políticas, las medidas y objetivos estratégicos del Plan de Gobierno: impulsar la logística como sector estratégico, reforzar la industria agroalimentaria y la marca ‘Aragón’ además de favorecer la vertebración del territorio y luchar contra la despoblación y fomentar el crecimiento sostenible del sector agroalimentario.

El nuevo complejo cárnico se enmarca en el plan de crecimiento elaborado por la compañía de Guissona

Con la puesta en marcha de este complejo cárnico, como avanzó SEGRE en marzo del año pasado, BonÀrea Agrupa complementará el que tienen en Guissona, conocido como La Closa. El centro leridano tiene capacidad para proveer las nuevas tiendas BonÀrea previstas dentro de los cinco próximos años. Más allá de este plazo, tanto por capacidad productiva como logística, el grupo necesita de un segundo gran centro de producción en una localización estratégica de cara a la expansión de las tiendas en Aragón, Navarra y norte, Madrid y centro y Valencia. En Épila, tendrá capacidad para proveer a miles de puntos de venta.

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