Daños al derrumbarse varias mallas antipiedra por la acumulación de nieve

La nevada que cayó la madrugada de ayer en el llano de Lleida provocó el derrumbe de varias mallas antipiedra en fincas de fruta de las comarcas del Urgell y el Pla d’Urgell. Estas instalaciones quedaron destrozadas por el peso de la nieve acumulada en las mallas, estropeando los árboles que protegían. Este fue el caso de varias fincas de Ivars d’Urgell, Arbeca y Barbens.

El presidente de Asaja Lleida, Pere Roqué, aseguró que las mallas protectoras “han quedado inservibles y, al caer, han dañado los árboles de abajo, con pérdidas de hasta el 100% en algunos casos, tanto de producción como de toda la instalación”. En este sentido, Roqué pidió subvenciones específicas para los productores para paliar los efectos de la nevada, ya que “no podrán producir hasta dentro de mucho tiempo, sumando gastos e inversiones extraordinarias sobrevenidas”.

Por otra parte, los agricultores están alerta por si bajan más las temperaturas, ya que el mayor peligro para los cultivos son las heladas nocturnas, sobre todo para los árboles frutales, como perales, manzanos y almendros, que ya han florecido, según Unió de Pagesos, JARC-COAG y Asaja Lleida. En las zonas de secano, la lluvia y la nieve ha sido beneficiosa para los cultivos de trigo y cebada, según UP, aunque en zonas donde el cereal ya estaba espigado ha podido provocar daños.