Los sindicatos volvieron a movilizarse ayer en Lleida para exigir unas pensiones dignas que se revaloricen en función de las subidas del IPC. En una concentración convocada por UGT y CCOO ante el Hospital Arnau de Vilanova que reunió a una veintena de personas, el responsable de pensiones de CCOO, Francesc Bademunt, reivindicó un pacto por las pensiones “fiable y duradero” que garantice la sostenibilidad de las prestaciones públicas a largo plazo, que ataje la progresiva pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas y que no pueda ser reformado por ningún Gobierno, “sea del color político que sea”. Asimismo, Bademunt recordó que, para robustecer las pensiones públicas, es necesario, en paralelo, incrementar los salarios de los trabajadores. De este modo, subirán las cotizaciones y entrará más dinero en el sistema, puntualizó. En definitiva, Bademunt indicó que el objetivo es “blindar” las pensiones públicas como un derecho.
En Lleida, a fecha de 1 de abril, había un total de 98.384 pensionistas, con una paga media de 820,26 euros. Los leridanos que perciben una pensión reciben, de media, 150,87 euros mensuales menos que el promedio catalán.
En lo que respecta a los planes de pensiones privados, solamente el 13% de los españoles menores de 55 años tienen suscrito uno, según un estudio publicado ayer por Fintonic. El porcentaje desciende hasta el 5% entre los menores de 35 años, pero asciende al 22,2% entre los que superan esa edad.