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La economía leridana registra los mejores resultados desde 2007

Según la Memoria Económica de Catalunya, los sectores industrial y turístico encabezan la mejora

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El Valor Añadido Bruto (VAB) de Lleida aceleró el crecimiento en 2017, con un 4%, la cifra más alta desde el inicio de la recuperación. Así se desprende de los datos de la Memoria Económica de Catalunya, patrocinada por Banco Santander, que ha sido presentada este jueves a la Cámara de Comercio de Lleida.

Según el estudio, en comparación con el conjunto de Catalunya, la recuperación económica en Lleida se está produciendo con unas tasas de crecimiento inferiores porque la caída también fue menor durante los años de la crisis. Eso se debe en buena parte a que la economía leridana depende más del sector agroalimentario, que no es tan cíclico como otros sectores económicos.

Por otra parte, las afiliaciones a la Seguridad Social crecen un 3% en la provincia de Lleida, el mayor ritmo desde el inicio de la crisis, si bien queda por debajo del incremento registrado en el conjunto de Catalunya (3,5%). El número de afiliaciones ha aumentado en todas las comarcas leridanas en 2017. La Val d'Aran y el Urgell son las comarcas que han experimentado un mejor comportamiento del mercado laboral, con incrementos del número de afiliados del 4,3% y 4,2%, respectivamente. Las tasas de paro registrales comarcales se sitúan entre la mínima del 5,1% en la Val d'Aran y la máxima el 12,4% del Segrià. Ninguna comarca supera la tasa de paro del 12,5%, hecho que sitúa la provincia de Lleida como la que presenta la tasa más baja de paro.

Los resultados de la Encuesta de Clima Empresarial que realizan las cámaras en colaboración con el Idescat muestra que el incremento de la marcha de los negocios se ha acelerado en la industria. En la construcción la marcha de los negocios es positiva en 2017, por primera vez desde el inicio de la crisis, mientras que en el comercio el incremento es todavía débil. Hay que señalar la que la industria ha sido el sector más dinámico en la creación de empleo (+6%), creando 1.483 afiliaciones netas en 2017, prácticamente el 30% de las creadas en toda la demarcación de Lleida (5.039).

El sector de la construcción residencial sigue estando en mínimos históricos. El número de viviendas iniciadas en 2017 (291) es inferior a la cifra del año anterior (330) y también está por debajo en la de acabados (448). Además, la ratio de viviendas iniciadas por cada 10.000 habitantes es de 6,7 en Lleida, inferior a la ratio de 2016. La recuperación del sector residencial está de momento centrada sobre todo en la provincia de Barcelona.

El balance turístico en Lleida es el más positivo de las cuatro provincias en 2017. Las dos marcas turísticas que más han aumentado en turistas alojados en hoteles en 2017 están en Lleida, y son la del Pirineo (11,6%) (que incluye 9 comarcas de las cuales 6 pertenecen en Lleida), y la de las Terres de Lleida (8,7%). El 2017, en cambio, no ha sido un año muy positivo para el turismo rural en la demarcación, ya que el número de turistas ha disminuido un 10%.

La evolución del sector exterior ha sido favorable en 2017, con un crecimiento de las exportaciones del 6,2% y un descenso de las importaciones del 1,2% El saldo exterior de Lleida se amplía gracias al éxito de la internacionalización del sector agrícola, según los datos de la Memoria Económica. De entre los principales 5 sectores exportadores, todos han registrado crecimientos excepto el de piensos, pero destacan los aumentos registrados en los sectores de otras manufacturas (11,5%), grasas y aceites (7,5%) y fruta y legumbres (7,5%). Las exportaciones de carne también aumentaron un 3%.

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