SEGRE

OBITUARI

Fallece a los 109 años y medio Pere Forcat, el 'padrí' de Lleida

Era el pequeño de tres hermanos de Torres de Segre y todos ellos han sido centenarios || Trabajó de carpintero en la Exposición Universal de 1929

Pere Forcat

Pere ForcatSTEFI GABRIELLE

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Nació el 23 de diciembre de 1907, pero nadie lo hubiera dicho. Pere Forcat Drudes, Peret de Cal Perxi de Torres de Segre, tenía la cabeza clara y se valía por sí mismo. El domingo 4 de junio aún fue al bar de los jubilados por su propio pie. Se tomó un cortado y leyó el SEGRE de cabo a rabo, como solía.

La siguiente semana se sintió cansado para salir de casa y, lentamente, se fue apagando. Con 109 años y medio, era el padrí de Lleida, y una de las personas de más edad de Catalunya. Tenía buenos genes. Su hermano mayor, Josep, nació en 1896 y murió en 2001 y el segundo, Ramon, también fue centenario. Era de 1898 y falleció cuando le quedaba poco para celebrar su 102 cumpleaños. “He sido el más pequeño de edad y de estatura, pero los he ganado a los dos”, bromeaba Peret.

Cultivó el huerto hasta los 102 y si dejó de ir en bicicleta a los 98 fue porque la familia se la escondió

Su vida es una lección acelerada de siglo XX. El primer coche que vio fue el de Alfonso XIII cuando fue a visitar las obras del Canal de Seròs. El pequeño de los Forcat solo tenía ojos para el automóvil y ni se fijó en el monarca.

Siendo adolescente se fue a Barcelona y trabajó de carpintero en las obras de la Exposición Universal de 1929. El mítico pabellón de Mies Van der Rohe no tenía secretos para él. Bueno, sí: “no sé para qué querían tantos carpinteros si todo era cristal , hierro y hormigón”.

También había participado en la construcción del Puente de Hierro de Sevilla, de 1926. “Si he vivido tanto es porque me tomo las cosas con calma y porque procuro pensar más en el presente que en el futuro”, decía.

Regresó a Torres de Segre porque se jubiló el carpintero y tomó el relevo. Allí se casó y tuvo dos hijas. Antes, sin embargo, tuvo que sufrir una guerra civil. Aunque pasaba de puntillas por esta cicatriz, a veces recordaba que la plaza del bar de los jubilados se creó porque las bombas destruyeron muchas casas.

Era un gran aficionado al fútbol que seguía el Barça a través de Puyal. “Me gusta más la radio que la tele”. Y hasta fue futbolista. En el Europa cuando estaba en Barcelona y en el primer equipo que tuvo Torres de Segre al regresar. El 9-N se convirtió en todo un mito al hacerse viral la foto de cuando fue a votar elegantemente vestido a punto de cumplir los 107.

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