Atención con la piel

“Protegerse contra el melanoma es tan sencillo como tener en cuenta lo que nos dice el sentido común”. Así lo afirma Rosa Maria Martí, catedrática en Dermatología de la Universitat de Lleida y dermatóloga en el Arnau de Vilanova, que explica que ante la llegada del buen tiempo hay que activar aún más los sentidos y “estar alerta ante los cambios que podamos detectar en nuestra piel”. Y es que en Lleida se diagnostican de media anual unos 45 nuevos casos de melanoma, un tipo de cáncer de piel que, se calcula, causa la muerte a unas 700 personas al año en España (cerca del 1% de fallecimientos de todas las muertes por cáncer) y que afecta a 10 de cada 100.000 personas en Catalunya. Según la experta, en las comarcas de Ponent “cada vez se detectan más melanomas en fases precoces”, lo que supone una buena noticia, ya que “lo que más preocupa es que hay un 20% de diagnósticos de la enfermedad en estadios muy avanzados”. Por eso, aunque los expertos afirman que “los médicos de familia cada vez están más concienciados sobre el melanoma”, sigue habiendo una falta de concienciación y sensibilización sobre cultura sanitaria “para conseguir disminuir estos diagnósticos en fases avanzadas y potenciar el diagnóstico precoz”.

Así, una de las premisas más importantes ahora que viene el calor es “tener en cuenta las recomendaciones de los especialistas y seguir al sentido común”, afirma Martí, que explica que para protegerse del melanoma y de otros tipos de cáncer de piel “se deben evitar las horas centrales del día en las que más exposición al sol hay (de 12 a 14 horas), usar prendas de ropa adecuadas (que tengan mangas) y accesorios como gafas de sol y gorros”. Otro clásico es la crema solar, “un producto que, a pesar de que su composición se ha mejorado a lo largo de los años y que se puede encontrar en varios formatos (spray, leche, gel...) parece que sigue costando su aplicación de forma habitual”. Por eso, una de las principales líneas de investigación en la lucha contra esta enfermedad es la búsqueda de un nuevo protector solar que no sea de uso tópico. “Hay varias investigaciones en curso que buscan fotoprotectores de vía oral, ya que estamos más predispuestos a tomar una píldora que a untarnos crema”, dice Martí, que explica que “de momento no se han encontrado pastillas efectivas”.

Nuevas líneas de investigación consiguen frenar o retrasar la metástasis del melanoma

Lo que sí ha encontrado la ciencia, concretamente un equipo de científicos del Melanoma Institute Australia (uno de los países en el que este tipo de cáncer causa más muertes) es un nuevo tratamiento que “frena o consigue retrasar la metástasis de los melanomas detectados en fases muy avanzadas”, dijo Martí, que explicó también que se están trabajando otras líneas de investigación que “mejoran el tratamiento de los pacientes con metástasis, aumentando su supervivencia”. Un ejemplo de ello es la de la investigadora postdoctoral Anna Macià, doctora de IRBLleida (ver desglose), que fue becada el pasado septiembre por la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) de Catalunya - Delegació Lleida y que, con la dirección de Rosa Maria Martí, investigará durante 4 años la resistencia a los fármacos convencionales.

¿Cuál es el objetivo de su investigación?

Estudiamos la heterogeneidad tumoral en el melanoma humano y en las resistencias a fármacos convencionales, buscando los posibles mecanismos que influyen en el desarrollo de esta resistencia.

¿Se refiere a la búsqueda de un nuevo tratamiento que no genere resistencia contra este tipo de cáncer de piel?

No, los pacientes suelen responder a los tratamientos, pero si desarrollan metástasis, el cuerpo ya no reacciona igual. Ahí es donde nosotros buscamos respuestas.

¿Cuántas personas forman parte de su equipo?

Se trata de un equipo de seis profesionales que provienen de diferentes campos de la ciencia y la salud: contamos con dos expertos en dermatología, un patólogo, una bióloga, dos técnicos de laboratorio y una oncóloga.

¿En qué se basa su proyecto y dónde buscan las respuestas?

Nuestra línea de estudio se basa en analizar los mecanismos que influyen en la generación de resistencia a los fármacos que se usan durante el tratamiento contra este tipo de cáncer de piel. Para estudiarlos, usamos modelos de diferentes procedencias: animales, células humanas y hasta muestras de pacientes del Arnau de Vilanova.