Torra pide a Ros “luchar juntos por la libertad de expresión” y rechaza “criminalizar” lazos

El president de la Generalitat, Quim Torra, pidió ayer al alcalde de Lleida, Àngel Ros, “luchar juntos por la libertad de expresión” y expresó su rechazo a “criminalizar colores, expresiones y lazos”. “Tengo plena confianza en que la polémica de los lazos amarillos no lo será en Lleida”, dijo, y deseó que la ciudad “esté a la vanguardia de la defensa de los derechos civiles y políticos de los catalanes” con “respeto a la libertad de expresarse de toda la ciudadanía”. Torra hizo estas declaraciones en presencia de Ros (ver desglose) durante su visita al Apec del Cargol, su primer viaje a la capital del Segrià desde que asumió la presidencia.

Amarillo, precisamente, no faltó durante la visita del president. Un grupo de miembros del CDR acompañó a la comitiva institucional portando un pendón de este color con imágenes de Carles Puigdemont y Carme Forcadell. Lo que debía ser un recorrido protocolario por el recinto del Aplec se convirtió en un baño de masas como rara vez se ha visto en Lleida. A cada pocos pasos, alguien salía al encuentro de Torra para estrechar su mano, fotografiarse con él o dedicarle unas palabras de aliento. Abrumado por tantas muestras de apoyo, tardó dos horas en atravesar el espacio de las peñas, una distancia que normalmente se recorre en apenas dos minutos.

Consignas como “llibertat presos polítics” y “ni un pas enrere” acompañaron el recorrido por el recinto del Aplec, mientras que algunas de las bandas de las peñas tocaron Els Segadors y la Santa Espina al paso de la comitiva de la Generalitat, la Diputación y la Paeria. Solo algunos miembros de una única colla increparon a Torra hacia el final del recorrido con gritos de “fuera, fuera” y “España, España”.

Por otra parte, Torra se refirió a la moción de censura que impulsa el líder del PSOE, Pedro Sánzhez, e insistió en conocer “cuál es su programa para Catalunya” antes de decidir su posicionamiento. Recordó que “en el franquismo, socialistas y catalanistas luchábamos por los mismos ideales, que pasaban por el derecho a la autodeterminación” y añadió que “queremos para Catalunya la misma libertad que para España, y eso lleva el nombre de república”.

Ros insiste en la ‘neutralidad’ y reclama ‘moderación’

El alcalde de Lleida, Àngel Ros, no respondió a la petición de Torra cuando este la hizo pública ante los medios de comunicación. Sí accedió a hacerlo al concluir el recorrido por el recinto del Aplec, en el que se escucharon gritos que pedían la dimisión del primer edil. Insistió en declararse partidario de mantener la “neutralidad” en los espacios públicos (algo que el delegado del Gobierno en Catalunya, Enric Millo, pidió la semana pasada a todos los ayuntamientos catalanes), aunque puntualizó que “no vamos buscando lazos amarillos para retirarlos”.