No hay edad para el saber

Los mayores de las comarcas leridanas llevan años demostrando que el saber no ocupa lugar ni tiene edad. Buena muestra de ello es el crecimiento que han experimentado las Aules d’Extensió Universitària de la UdL, que en este curso que acaba han contado con 3.366 alumnos, más que el doble de los que había inscritos hace solo cinco años, cuando fueron aproximadamente 1.500. Todavía de forma más espectacular se ha incrementado el número de aulas distribuidas por la provincia. Actualmente son ya 18 repartidas en una veintena de poblaciones de 10 comarcas, mientras que hace un lustro solo había cinco. “La previsión es abrir nuevas. Por ejemplo, la de Bellpuig ya está apunto”, anunció Joan Biscarri, vicerrector de Activitats Culturals i Projecció Universitària de la UdL.

Buena parte de este éxito se le debe también al Aula d’Extensió Universitària de Lleida, que ayer puso el punto y final en el Auditori a un nuevo curso en el que han marcado un récord de alumnos con 1.031 y con más de 350 sesiones impartidas. “Por tercer año consecutivo, somos la segunda aula de Catalunya en número de conferencias”, explicó Francesc Rué, presidente de la junta organizadora. Y las previsiones, por el nivel de inscripciones y de consultas a día de hoy, apuntan a que el próximo curso superarán los 1.200 inscritos, manteniendo el mismo ritmo de crecimiento de los últimos años. “Funcionamos mucho a través del boca a oreja. Yo creo que se debe a que los mayores de hoy en día tienen más ganas de hacer cosas y a que nos jubilamos antes”, señaló Rué, que también anunció que a partir del próximo curso las actividades también incluirán seis sesiones de cine y de teatro. Se sumarán a los temas clásicos sobre historia, geografía o filosofía y a los cada vez más demandados sobre actualidad como la informática e internet.