Detección precoz contra el suicidio

La Organización Mundial de la Salud lleva años alertando de que el suicidio es un problema de salud pública y el ministerio de Sanidad está avanzando en la elaboración de un Plan Nacional basado en la detección precoz y la publicidad. En 2016, treinta y nueve personas se quitaron la vida en Ponent. En el conjunto de España, se producen entre 3.500 y 4.000 suicidios al año, lo que supone 10 muertes por esta causa al día y causa el doble de muertos que los accidentes de tráfico.

Para abordar una estrategia estatal, la ministra de Sanidad, Carmen Montón, se reunió el pasado viernes con asociaciones de pacientes y profesionales. Un plan que se basaría en el que aprobó siendo consejera de Salud de la Comunidad Valenciana. La clave está en la detección temprana, tanto por las personas del entorno como por los médicos de atención primaria, lo que pasa por informar sobre las señales para detectarlo antes de que pase. Otro paso del plan es la atención prioritaria de estas personas, íntimamente ligados con problemas de salud mental. La estrategia también pasaría porque se hable “bien” del suicidio desde los medios de comunicación, ya que sigue siendo un tema tabú que causa miedo por el efecto contagio. Al respecto, la Confederación Salud Mental señaló ayer, Día Mundial para la Prevención del Suicidio, que ha puesto en marcha una campaña en las redes sociales, “#HablaDelSuicidio”, en la que se insta a la sociedad a visibilizar este fenómeno ya que, según la Confederación, “hablar es el primer paso para trabajar en la prevención”. También insisten en la necesidad de romper con los mitos y acabar con el estigma y la culpa. El objetivo, según las asociaciones y profesionales, es publicitar que se puede conseguir apoyo y facilitar las herramientas para pedir ayuda.

Programa puesto en marcha en Catalunya a finales de 2013 para facilitar la prevención y la atención

Según la OMS, a través de “intervenciones oportunas” y de bajo coste se pueden reducir las tasas de suicidio en el mundo y se recomienda capacitar a los trabajadores de salud no especializados en la evaluación y el manejo del comportamiento suicida. En Catalunya, la Generalitat puso en marcha en diciembre de 2013 el programa Código Riesgo Suicida para incrementar las medidas de prevención. Desde entonces y hasta el año pasado, la unidad del Arnau-Santa Maria de Lleida atendió a más de 600 leridanos por tentativas de suicidio, de los que dos fallecieron. Ponent registra cada año unas 200 tentativas de suicidio mientras que las consumaciones se incrementaron el año pasado hasta un total de 39, nueve más que las víctimas de tráfico.