Ferias que desbordan pueblos

Unas doce mil personas acudieron ayer a la Fira de la Perdiu de Vilanova de Meià, mientras que un número similar recorrió el recinto de la Fira de Tardor de Sort a lo largo del fin de semana, según estimaciones de los ayuntamientos. Son cifras que multiplican por treinta el número de vecinos de la localidad de la Noguera; y por cinco la de la capital del Pallars Sobirà. En el Urgell, la Fira de la Conserva de Bellpuig atrajo también a miles de personas.

La Fira de la Perdiu reunió a 140 expositores en el sector reservado a criaderos de perdices, artesanos y productos del campo. La cifra se eleva a 200 si se cuentan además los puestos de ropa. El alcalde, Xavier Terré, señaló que han logrado que todos los criaderos incluyan la perdiz roja, variedad autóctona que el municipio quiere potenciar. El vicepresidente cuarto de la Diputación, Eloi Bergós, destacó en la inauguración la “singularidad” del este certamen “dedicado a las aves”.

La feria de Bellpuig quiere vincular los alimentos de proximidad a la promoción de hábitos saludables

En Bellpuig, miles de personas asistieron el fin de semana a la 7ª la Fira Conserva’t. El alcalde, Salvador Bonjoch, explicó que “el objetivo es promover la actividad física, maridándola con alimentación saludable y productos de proximidad”. Por su parte, el director de los servicios territoriales de Empresa, Ramon Alturo, apuntó que la feria “genera dinámicas en beneficio de la salud, lo que le da innovación y un largo recorrido”. La feria reunió a 35 productores de proximidad y comercios locales. El premio a la mejor conserva o mermelada fue para una crema de avellana con algarroba de Curculio Nucum de La Selva del Camp.

En Sort, la Fira de Tardor cerró sus puertas con una jornada que incluyó un concurso morfológico de oveja xisqueta, demostraciones de esquilado y un concurso en el que pastores demostraron su destreza con el gancho para atrapar ovejas.