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Haciendo la colada fuera de casa

Las lavanderías autoservicio se han convertido en un negocio en auge en Lleida, que ya cuenta con seis establecimientos || Los clientes buscan lavar y secar la ropa desde 7€ y en menor tiempo

Uno de los clientes haciendo la colada en la lavandería La Colada Lleida, con tres lavadoras y dos secadoras de autoservicio.

Uno de los clientes haciendo la colada en la lavandería La Colada Lleida, con tres lavadoras y dos secadoras de autoservicio.ITMAR FABREGAT

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Dice el refrán que ‘la ropa sucia lava en casa’, aunque cada vez son más las personas que optan por hacer la colada en lavanderías autoservicio. Y es que bajar los “trapos sucios” al local de la esquina para poner una lavadora junto a tres personas más ya no suena a película americana. En tan solo tres años han proliferado en Lleida este tipo de negocios, que por un precio a partir de los siete euros ofrecen servicio de lavado y secado. Una de las últimas lavanderías autoservicio en abrir sus puertas es La Colada Lleida, en el barrio de Cappont. Sus responsables aseguran que la cosa les va mejor de lo que esperaban y que cada persona que entra en el establecimiento para probar sus servicios “se convierte en un cliente habitual”. “Lavar fuera de casa es desde décadas una expresión cultural en muchos países y precisamente eso es lo que queremos conseguir aquí: hacer de las lavanderías un espacio de socialización en el que poder hacer la colada a un precio razonable”, apuntan desde La Colada. En esta línea se expresan también los propietarios de Dit i Fet, uno de los precursores en este sector en 2015. “Quisimos traer a Lleida un modelo de lavandería que funciona en otras grandes ciudades, aunque en nuestro caso siempre tenemos personal al que puedes pedir ayuda”, explican, al mismo tiempo que apuntan que “el autoservicio solo supone un 10% de nuestra facturación”. La mayoría de clientes son estudiantes, inmigrantes o clientes que aprovechan las máquinas profesionales para secar los edredones y las mantas más cómodamente. Entre estas últimas se encuentra Maite, que ayer acudió por primera vez a uno de estos establecimientos para lavar la ropa de invierno. “Me parece una muy buena idea y hace tiempo que lo quería probar porque te ahorra el dinero y el tiempo de una tintorería”, explicó esta leridana.

Uno de los clientes haciendo la colada en la lavandería La Colada Lleida, con tres lavadoras y dos secadoras de autoservicio.

Uno de los clientes haciendo la colada en la lavandería La Colada Lleida, con tres lavadoras y dos secadoras de autoservicio.ITMAR FABREGAT

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