Aprendiendo a ser valiente

La ludoteca de La Bordeta se ha convertido esta semana en una centro sanitario con pacientes de lo más peculiares: ositos de peluche. Los “médicos”, más de trescientos niños de entre 3 y 5 años de ocho colegios de Lleida, se encargan de auscultarlos concienzudamente, hacerles radiografías y vacunarlos para que no enfermen. Se trata del Hospital de ositos de peluche, una iniciativa impulsada hace ya cinco años por la Associació d’Estudiants de Ciències de la Salut (AECS) y que tiene como objetivo que los más pequeños pierdan el miedo a las revisiones médicas. “Las consultas y los hospitales pueden llegar a ser espacios intimidatorios para los más pequeños, por eso queremos que pierdan el miedo y se sientan cómodos cuando tengan que hacer cualquier visita al médico”, explicó ayer Soraya El Hajmouni, responsable de la actividad junto a Marina Cuesta. Una de las novedades de este año es la sala de vacunas, con la que los niños inmunizan a sus peluches con agujas gigantes y agua de colores. Sin embargo, la actividad estrella se lleva a cabo en la sala de operaciones, donde los niños y niñas ponen tiritas e inyectan suero a sus muñecos ataviados con el gorro y la bata propios de los quirófanos. “Es muy bonito ver la ilusión y el mimo con el que los pequeños atienden a sus ositos”, explicó El Hajmouni, mientras subrayaba el éxito de participación en una actividad más que consolidada. “Siempre se inscriben muchos estudiantes de Ciencias de la Salud para participar y este año hemos alcanzado los 120 voluntarios”. En turnos de mañana y tarde, los universitarios supervisan las clases prácticas, con las que inculcan la importancia de los tratamientos médicos. En este sentido, para aprender que deben entrar solos a las salas de radiografía, analizan ‘placas’ de muñecas, ositos, perros y pingüinos.

Animar a los niños ingresados del Arnau, nuevo objetivo de la AECS Una de las próximas iniciativas que la AECS quiere llevar a cabo es un acuerdo de colaboración con el hospital Arnau de Vilanova de Lleida para atender a los pequeños ingresados y hacer de la estancia hospitalaria una experiencia más amena. Pero más allá de centrarse en los más pequeños, los voluntarios de la Associació d’Estudiants de Ciències de la Salut (AECS) ofrecen desde hace años charlas en los institutos para concienciar a los adolescentes sobre temas relacionados con el bullying, la educación sexual y la salud de los refugiados. Se trata del proyecto Escala, con el que se pretende que los jóvenes interactúen entre sí y expresen sus dudas libremente. “Desde la asociación queremos impulsar proyectos diferentes para acercar las cuestiones sobre salud a toda la sociedad, no solo a los estudiantes de medicina”, explicó la responsable de la entidad, Soraya El Hajmouni. Entre las propuestas académicas que organiza la asociación destacan las simulaciones de epidemias globales, en las que los universitarios asimilan un rol (representantes de la Organización de las Naciones Unidas y gobiernos de diferentes países, entre otros) para dar respuesta a situaciones de emergencia sanitaria a gran escala. “Con ello concienciamos a las personas sobre la dificultad de gestionar emergencias en las que los gobiernos están implicados”, apuntó El Hajmouni.