Aprender a hacer buena letra

Coincidiendo con el Día Mundial de la Escritura a Mano, los alumnos de P-5 del colegio Mare de Déu del Socós de Agramunt fueron los protagonistas ayer de un taller de trazo, que impartió la calígrafa Laia Soler. El director del centro, Josep Maria Porté, explicó que en este curso los alumnos se introducen a la lectoescritura y con talleres de estas características los pequeños “aprenden destrezas que les estimulan a escribir bien, a la vez que fomentan la concentración y la motricidad fina”. Porté también dijo que “aunque vivimos en un mundo digital y en el centro disponemos de recursos de estas características, no podemos olvidar destrezas y habilidades que hemos ido aprendiendo y que son importantes porque no siempre tendremos un ordenador a mano”.

Por su parte, la calígrafa Laia Soler destacó que el principal objetivo del taller era que los niños “aprendan arquitectura de letra, como se construyen”. Según Soler, “no les enseño a hacer letras bonitas sino que pretendo que tomen conciencia de los trazos que tienen las diferentes letras poniendo atención al espaciado, tanto entre las propias letras como entre palabras”. Para Soler, “es muy importante que cojan ritmo y que conozcan los orígenes del alfabeto latino”.

Durante una hora, los niños aprendieron a escribir algunas letras con cañas de río y tinta de noguerina. Para acabar la clase, Laia Soler mostró en la pizarra cómo se escriben todos sus nombres. Soler explicó que la caligrafía es un arte cada vez más popular entre ilustradores y diseñadores gráficos si bien no existe un grado específico sino que “debemos formarnos asistiendo a diferentes cursos y asignaturas”. Soler también dijo que en Catalunya se valora más este arte y que “tenemos tres de los mejores calígrafos del mundo: Keith Adams, Amanda Adams y Oriol Miró”.