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Durro abre las Fallas leridanas
Imagen de archivo de las Fallas en Durro.
Las fiestas de Sant Joan se acercan y en el Pirineo leridano es sinónimo de Fallas. Durro será el encargo de abrir el calendario el próximo domingo 15 de junio, siendo el primer municipio de los que celebran esta fiesta milenaria en su cuarto año como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. La Alta Ribagorça espera unos 20.000 visitantes durante los siete fines de semana de fallas, hasta el próximo 27 de julio. El patio del IEI acogió ayer, con música incluida, la presentación del programa de las fiestas del fuego en la Ribagorça, que concentra diez de los 15 municipios que tienen declaradas las Fallas como Patrimonio de la Humanidad. En total, son 17 los municipios leridanos que celebran esta fiesta del fuego.
El presidente del consell comarcal de la Alta Ribagorça, Josep Lluís Farrero, destacó que desde la declaración de la Unesco el número de visitantes se incrementa cada año y apostó por conservarlo. Así, este año se estrenará la señalización de los caminos que recorren las bajadas de las Fallas, desde el faro donde se encienden en la montaña, hasta el lugar al que llegan los fallaires en su descenso al municipio. Todo ello para que los turistas puedan conocer con más detalles las características de esta fiesta durante todo el año y también con luz de día. En total, el consell comarcal ha señalizado todo el recorrido de los Caminos de Fuego y se han instalado paneles explicativos con las singularidades de cada municipio, ya que la Ribagorça celebra hasta nueve tipos diferentes de Fallas y que estos días pueden conocerse a través de una exposición en el IEI.
En el Pallars Jussà, La Pobla de Segur recogerá el testigo de Durro y será la siguiente en protagonizar la bajada de Fallas. Será el próximo 17 de junio, como es tradición, coincidiendo con la festividad de la Mare de Déu de la Ribera. El año pasado, La Pobla escribió una nueva página en la historia de las fiestas del fuego con la participación de mujeres por primera vez como fallaires. El punto álgido del calendario será la víspera de Sant Joan, el día 23, donde se concentran la mayoría de bajadas en varios municipios de la Alta Ribagorza, el Jussà, el Sobirà y Aran. La localidad de Llesp será la encargada de cerrar la fiesta el próximo 27 de julio.
