Broche de música y fuego

Actividades familiares, puertas abiertas en monumentos, baile, conciertos y un espectáculo pirotécnico pusieron ayer el broche a las Festes de la Tardor de Lleida. En un lunes festivo en la capital del Segrià, los monumentos celebraron jornada de puertas abiertas: el Castell dels Templers en Gardeny y la Seu Vella y el Castell del Rei-la Suda. Además, la Seu Vella abrió también en la tradicional visita nocturna, que culminó con la vista privilegiada desde el claustro del espectáculo de los fuegos artificiales que puso el broche final a unas fiestas con alta participación popular. El propio alcalde, Miquel Pueyo, quiso destacar este éxito, aunque señaló que “ha sido fruto no solo de la estructura organizativa, ya que también han intervenido factores como el del buen tiempo, que ha permitido una elevada participación”. Pueyo valoró “la falta de incidentes, a pesar de la gran cantidad de actos programados”, y añadió que “se ha demostrado que los leridanos tienen ganas de pasárselo bien, pues se ha roto la tendencia a irse de Lleida en fiestas. Por todo ello, me siento satisfecho no solo como alcalde sino como leridano”. Por su parte, el concejal de Fiestas, Ignasi Amor, informó que “según la Guardia Urbana, un 40% de ciudadanos salieron a la calle a disfrutar de la fiesta” y destacó el éxito de las verbenas en Rovira Roure, que “reunieron a 12.000 personas”, con horarios avanzados que permitieron “la asistencia también del público familiar”. Finalmente, avanzó la voluntad de la Paeria de “programar más actividades de día en nuevas ediciones”. La última jornada contó con animación familiar en la plaza Sant Joan, que por la tarde se llenó con el baile popular. La plaza del Dipòsit disfrutó de conciertos de Virtuts Homòlogues y Food4Soul, y tampoco faltaron las sardanas en la plaza Paeria, con una ballada con la Cobla Tàrrega.