Las altas temperaturas aceleran la floración de los almendros en Lleida

Las altas temperaturas, atípicas, para principios de febrero llenaron ayer terrazas de bares y restaurantes en la provincia de Lleida. Por ejemplo, en Aitona se alcanzaron 22 grados centígrados, pero en Arties, en plena montaña a 1.143 metros de altitud, se registraron 18, y a 2.500 metros, en Boí Taüll hubo una máxima de 6. Este calor inusual está adelantando el desarrollo fenológico de cultivos y se pueden encontrar en muchos campos almendros en flor. Con ello, se multiplica el riesgo de que heladas posteriores puedan diezmar la producción. Pero no son los únicos payeses preocupados, porque otros cultivos necesitan horas de frío para su correcto desarrollo, como los frutales.

Las altas temperaturas se repitieron ayer en toda Catalunya y en prácticamente el conjunto del Estado, con lo que se podía ver playas incluso con bañistas. Además, las previsiones apuntan a que el mercurio se mantendrá hoy alto. Pero se augura la vuelta del frío mañana, con caídas de los termómetros 5 a 10 grados en el llano.

Ayer se celebraba el día de la Candelaria y el refrán afirma que Si la Candelera plora, l’hivern és fora; si la Candelera riu, l’hivern és viu. Teniendo en cuenta que ayer no llovió, el invierno debería estar lejos de acabar. La famosa marmota de Pensilvania, sin embargo, prevé que este año la primavera se avanzará.