SEGRE

ESNOTICIA

La Lleida rural también se confina

La percepción del riesgo es menor en los pueblos pero la población está más envejecida y se hace un seguimiento especial|| Los vecinos salen a la calle sin coincidir con otros y el contagio cae

La encargada de la única tienda de Nalec preparando una de las cajas de comida que repartirá a domicilio, según indicaciones de la alcaldesa.

La encargada de la única tienda de Nalec preparando una de las cajas de comida que repartirá a domicilio, según indicaciones de la alcaldesa.SEGRE TÀRREGA

Publicado por

Creado:

Actualizado:

Esquivar el coronavirus es tarea de todos pero se vive de forma muy dispar según el lugar de residencia. En las zonas rurales, en los últimos meses bautizadas aquí como la Lleida vaciada, la percepción del peligro es la misma pero el riesgo de contagio es algo menor. La causa es la densidad de población. Catalunya tiene una media de 239 habitantes por kilómetro cuadrado, una cifra que se dispara hasta los 15.600 habitantes por kilómetro en la comarca del Barcelonès y que cae, en cambio, hasta los 5 en el Pallars Sobirà, 9,7 en el Jussà o 13,9 en el Alt Urgell. En Lleida ciudad, en cambio, hay una media de 654 personas por kilómetro cuadrado.

En este contexto, hay leridanos para quienes el lugar de confinamiento es un pueblo entero donde no hay más vecinos. En el núcleo de Cava (uno de los tres agregados del municipio con el mismo nombre, que está entre los más pequeños de Catalunya) viven dos familias, cuatro vecinos en total. Cada familia en un extremo del pueblo. Miquel Dalmau, uno de ellos, explica que en estos municipios se vive un “confinamiento durante los 365 días del año”. Mantienen contacto telefónico diario “para saber que todo marcha bien”. Para Dalmau, las calles del pueblo “son como el jardín de mi casa, me puedo mover por ellas sin miedo a contagiarme ya que por esta zona paseo yo solo, no tenemos ni comercios, ni aglomeraciones, ni nada parecido”, “hacemos vida normal”. En la misma comarca del Alt Urgell, en Josa, Mercè Lagrava y Raül Alcaraz, propietarios de la Formatgeria Serrat Gros, afirman que “el confinamiento lo acabamos haciendo a nuestra manera ya que nuestras cabras no entienden de restricciones y estamos en pleno inicio de temporada”. Pese a todo, Mario Urrea, presidente de la Associació de Micropobles de Catalunya y alcalde de Torrebesses, avisa que los pueblos no están exentos de control policial. Urrea sostiene que “no nos consta que haya ningún contagio entre los municipios de nuestra asociación”, con más de 150 miembros. Y remarca la “potente red comunitaria” que caracteriza a estas localidades. En el llano, Nalec es uno de los municipios con menos vecinos. Una de las decisiones que ha tomado la alcaldesa, Agnès Corbella, frente a la crisis sanitaria es pedir a la única tienda del pueblo que atienda los pedidos a domicilio. Corbella mantiene contacto con todos los vecinos para asegurarse de que están bien (ver página 11).

tracking