«Nos espera una temporada apasionante»

Una temporada más al frente de ‘El Món’, la número 14, en el programa insígnia de RAC1 y líder de audiencia con casi 700.000 oyentes según el EGM ¿Cómo lo afronta y por qué sigue?

Buena pregunta, pero principalmente, como dice la expresión, porque ‘m’hi veig amb cor’. Recuerdo que cuando empecé con el programa no había una planificación tan bestia como ahora. Además, uno se va haciendo mayor y son muchos años levantándome a las 4.15 horas y no de hacerlo a las ocho o a las nueve de la mañana y tener una vida más normal. Estos pecados me los debe perdonar la familia. Al final, te dices a ti mism, va ‘un año más’ porque sabes que va ser más apasionante y más difícil.

Además se presenta un temporada compleja con la pandemia mundial, las posibles elecciones a la Generalitat de Catalunya, ...

Sí. Venimos de unos años muy intensos, especialmente por el ‘Procés’. Nos esperan unas elecciones potentísimas y será sociológicamente interesante ver cómo reacciona la sociedad catalana y comprobar si la pandemia ha rebajado la fuerza del movimiento soberanista o, por el contrario, la gente se vuelca.

¿Cuáles son las novedades principales de la nueva temporada?

No quiero decirlas, quiero que los oyentes vayan descubriéndolas. Como es lógico habrá algunos retoques. Lo que tengo muy claro es que la gente no quiere pescado congelado, lo quiere fresco. Saber lo que está pasando en el momento en el que sucede, ya sea de pandemia, política, series, deportes, etc.

Las cifras de audiencia de su programa son realmente mareantes.

Siempre digo que tenemos una responsabilidad social muy elevada. Somos la segunda voz del día que se escucha en muchos hogares tras la del padre, la madre o el compañero. Formamos, en cierto modo, parte de estas familias y el reto es bestial, más aún en tiempos como los actuales. Muchas veces pienso que no estábamos preparados para asumir todo esto.

¿Cómo lo gestiona?

Sabiendo que no estamos por encima de nadie ni queremos estarlo. Nuestro programa quiere ofrecer aquellos contenidos que a nuestro equipo nos gustaría escuchar si estuviéramos en casa. Yo no tengo ni quiero tener cultura política para poner o quitar un presidente y así en todos los ámbitos.

La principal novedad radiofónica de la temporada está en Catalunya Ràdio con la marcha de Mònica Terribas y la llegada de Laura Rosel. Esta última nos ha comentado que usted es su padre radiofónico. Con Terribas tenían una competencia muy sana. ¿Qué valoración hace?

Mónica Terribas es como mi hermana, con ella tengo una relación ‘familiar’ muy fuerte. Suelo elogiarla. En cuanto a Laura Rosel, me horroriza ser su padre radiofónico por una mera cuestión de edad porque significa que ya tengo unos cuantos años. Con Laura Rosel también tengo una muy buena relación y fue una voz importante en RAC1. Cuando le ofrecieron el programa, me llamó para pedirme consejo. Le dije que tuviera cuidado porque las sillas de ‘El matí de Catalunya Ràdio’ tienen muchos pinchos. También le aconsejé que fuera ella misma y que no se dejara presionar. Tiene el talento para hacerlo bien pero acaba de coger un transatlántico y será complicado para ella y para cualquier otro periodista.

En los últimos dos años ha compaginado radio y televisión con el programa de tecnología ‘No pot ser’ en TV3. ¿Habrá tercera temporada?

Nos ofrecieron hacer dos programas sobre la Covid-19 pero al final no pudo ser por cuestiones de presupuesto. Está prevista una tercera temporada pero que no será de manera inmediata sino para el curso 2021-2022. Me lo pasé muy bien haciéndolo y también debo decir que tenemos una televisión pública que hace programas de un nivel excelente que no tienen en los mejores canales de Europa. La temática del programa genera un gran interés en el espectador.

Es un periodista de referencia y, en consecuencia, es muy fácil recibir críticas. Hace unos meses dijo que el coronavirus era una simple gripe. Ha pedido disculpas en reiteradas ocasiones y, aun así, siempre siguen los llamados ‘haters’. Y usted pasó la Covid-19.

Siempre digo que no tenemos que perder a la gente que nos quiere ni la gente que nos odia. Ha sido un error global, desde la misma comunidad médica a los medios de comunicación. Nos hemos encontrado ante un tsunami único. En mi caso, hasta dos médicos me dijeron que tenía una gripe. Fue una negligencia decirlo pero es perdonable. Nadie sabía lo que en realidad era. Hemos de ser extremadamente prudentes y ya me parecen bien las críticas.

Usted es un gran seguidor del FC Barcelona. ¿Qué le parece lo que está sucediendo estos días con Leo Messi?

(la entrevista se hizo el jueves)

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Desde mi punto de vista es intolerable e inasumible. Todavía estoy en estado de shock. Hay noticias que a nivel personal tienen un impacto diferente al resto. Me pasó algo parecido con la muerte de Michael Jackson. Recuerdo que cuando entrevisté a Gerard Piqué para TV3, dijo que “será cómo cuando se muere un padre”. No debería acabar de esta manera tan abrupta. El Barça ha lucido al mejor jugador de toda la historia, la Liga también ha lucido al mejor de toda la historia. Es muy fuerte. Tengo la sensación de que lo estamos regalando. Messi se debe retirar aquí y después debería ser el embajador del club o lo que él quiera ser.