El cierre municipal se prolonga hasta el día 24 e indigna a hostelería y comercio

El cierre municipal y las limitaciones de aforos y horarios al comercio y la hostelería se prolongarán una semana más de lo previsto y estarán vigentes hasta el día 24. El departamento de Salud argumentó que es necesario ante el creciente número de contagios y la presión sobre las unidades de cuidados intensivos (UCI), con el 84% de las camas ocupadas en Catalunya.

La conselleria alertó de que esta tendencia al alza se mantendrá en los próximos días. Por su parte, el sector comercial y los hosteleros expresaron su indignación al considerar que se les culpabiliza sin motivo y que sufren un perjuicio injusto por estas medidas, que califican de “cierres encubiertos”.

La prórroga de las restricciones se anunció un día después de que del Pirineo y Aran reclamasen en un manifiesto el regreso al confinamiento comarcal, menos lesivo para el turismo en plena temporada de esquí. La consellera de Salud, Alba Vergés, afirmó al respecto que el cierre municipal “tiene repercusiones para todos” e insistió en que las medidas en vigor “son adecuadas para frenar el crecimiento” de contagios. “No podemos mantenerlo ni tensionar más el sistema sanitario”, recalcó. El riesgo de rebrote en la región sanitaria pirenaica ha caído en una semana de 1.132 puntos a 615, un valor mucho menor pero aún alto.

Vergés ve las restricciones “adecuadas” y Tremosa plantea “suavizarlas” antes de final de mes

Mientras Vergés comparecía ante los medios, el conseller de Empresa, Ramon Tremosa, afirmaba en La Vall de Boí que “valoramos con las autoridades sanitarias pasar del confinamiento municipal al comarcal” y que “antes de final de mes intentaremos relajar estas medidas de lunes a viernes”, si lo permite la situación epidemiológica. “Si las estaciones de esquí siguen como ahora el 1 de febrero, muchas cerrarán”, advirtió Tremosa, que insistió en “salvar el máximo de actividad empresarial”.

Por su parte, los firmantes del manifiesto del Pirineo afirmaron que insistirán en su reivindicación, que ha recibido además la adhesión de los ayuntamientos de las comarcas de montaña. La Federación de Hostelería lamentó la “falta de previsión” por parte de la Generalitat y reclamó “medidas excepcionales” para salvar el sector.

A estas quejas se sumaron las patronales del comercio. “Es un estrangulamiento constante”, lamentó el presidente de Pimec Comerç, Manel Llaràs, y recalcó que “no dudamos que hay que tomar medidas, pero estas no son adecuadas”. Recordó que “la mayoría de comercios de la capital viven en buena parte de clientes de fuera de la ciudad, lo que provocará más cierres”. Asimismo, valoró que “las ayudas son poco efectivas y llegan tarde”.

Llaràs añadió que se dan casos de “pequeños comercios que no pueden pagar impuestos al estar cerrados y que, por ello, no pueden recibir ayudas, es absurdo”. Por su parte, la presidenta de la Fecom, Maria Rosa Eritja, aceptó con resignación el anuncio del Govern. “Lo veíamos venir y creo que aún endurecerán más las restricciones”, lamentó. Apuntó que el Govern “debería investigar el origen de los contagios y actuar en consecuencia”. “Veremos si en una semana la situación mejora, pero somos pesimistas”, concluyó.

“Acabamos el año mal y lo empezamos peor”

“Con esto ya podemos dar por finiquitadas las rebajas”. Así de contundente se mostró el presidente de los comerciantes del Eix de Lleida, Llorenç Gonzàlez, tras el anuncio de la Generalitat de prolongar las restricciones. Una decisión que ven “horrible, porque muchos de nuestros clientes son de fuera de la ciudad y el descenso de ventas ya es notorio, acabamos el año mal y lo empezamos peor”. Gonzàlez advirtió que esta situación “puede afectar a la salud mental de los trabajadores que están en ERTO, es muy difícil seguir adelante si las medidas no acompañan”. Por ello, el presidente del Eix valoró que “si hubieran destinado las ayudas para empresas a contratar sanitarios no estaríamos así”. Por su parte, Pilar Rodríguez, que regenta la perfumería Equivalenza, no duda en asegurar que a los comerciantes “nos culpan de algo que no hemos hecho” y ve “un desastre desde el minuto cero” las restricciones. “Estamos alargando una agonía que en Lleida nos ha afectado especialmente e incluso me he llegado a plantear el cierre, suerte de los clientes fijos que tengo, pero la mayoría dependemos de gente de toda la comarca para salir adelante, cosa que veo muy difícil”, concluyó. 

Piden ‘medidas excepcionales’ que para que el Pirineo ‘sobreviva’

El presidente de la Federación de Hostelería de Lleida, Josep Castell-arnau, pidió “medidas excepcionales ante una situación excepcional” para que el Pirineo pueda “sobrevivir”. “Lo que hace falta es que vengan turistas y que nos permitan abrir diez horas seguidas”, afirmó. Castellarnau aseguró que la situación del sector es ya muy grave y denunció falta de previsión por parte del Govern. en este sentido, apostó por crear un “pasaporte sanitario” que permita desplazarse para visitar las comarcas de montaña. Mientras, el manifiesto de los cinco consells del Pirineo y el Conselh Generau de Aran para reclamar un trato diferenciado para los municipios de montaña recabó ayer la adhesión de la práctica totalidad de ayuntamientos del Pirineo. Reivindican un confinamiento comarcal y una mayor movilidad transfronteriza, así como ayudas directas. La Síndica de Aran, María Vergés, solicitó mejorar la interlocución con la Generalitat y ayudas al sector turístico, informa E. Farnell.