Ingenio para mantener vivo el negocio

Muchos negocios tienen dificultades para salir adelante debido a la pandemia y más los que están situados en pueblos pequeños, perjudicados especialmente por el confinamiento municipal. Para evitar su desaparición, vecinos de la Vall del Corb idearon una campaña para ayudar a salvar el Rocallaura Cafè, ubicado en Rocallaura, de modo que el establecimiento vende cuatro tipos distintos de vales (50, 100, 200 y 400 €) para conseguir unos ingresos que le permitan pagar sus gastos fijos y subsistir durante estos meses tan duros. A partir de marzo de 2022, cuando se prevé que la situación mejore, los devolverán a us compradores, ya sea en especies o con dinero. Los vales tienen distintos nombres de animales del territorio (ardilla, tejón, corzo y pájaro) y, según los responsables del establecimiento, están teniendo “muy buena acogida, hecho que nos anima a seguir”. “No queremos cerrar. Queremos mantener lo que creamos hace casi 8 años. Una opción gastronómica y cultural sencilla que ofrece los sabores y colores de la Vall del Corb”, dijeron. También animaron a otros a copiar la iniciativa.

Uno de los impulsores y autor de las fotografías que ilustran los vales es Eduard Viver que explicó que que “es imprescindible que todo el mundo ayude a sus restauradores locales” y destacó que la iniciativa es un “modelo local de territorio”. Y es que en caso de tener que cerrar, no solo se perderá un negocio y puestos de trabajo sino que también un espacio de socialización y de cultura (organizan teatro y caminatas, entre otras actividades), a la vez que perjudicaría a los productores de la zona.