Las comidas familiares compensaran las cancelaciones de las de empresa

El aumento del gasto, la subida de precios y la nueva variante de la Covid marcarán las comidas de estas Navidades, que tanto mayoristas como comerciantes y hosteleros afrontan con un “optimismo prudente” que les permita cerrar bien el año. Por su parte, la patronal de los supermercados prevé un aumento de la facturación de entre el 5% y el 10%.

Las fiestas de Navidad están a la vuelta de la esquina y con ellas los encuentros familiares con comidas en casa o en los restaurantes y un consumo mayor de lo habitual.

Y es que según un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en diciembre el gasto es un 18,8% más alto que cualquier otro mes. No obstante, en el 2020 el presupuesto en ágapes navideños bajó un 7% debido a las restricciones por la Covid. La pandemia sigue, pero se espera que el consumo navideño crezca entre un 5% y un 10% gracias a las comidas familiares.

Un factor al que también se le suma una subida de precios de la mayoría de alimentos. Por ello, supermercados, mayoristas, comerciantes y hosteleros confían que la nueva ola del coronavirus no impida celebrar las fiestas en familia en casa o en un restaurante, para así poder cerrar con buenas cifras y optimismo el segundo año de pandemia. Además, los restaurantes esperan compensar por esta vía las cancelaciones de comidas de empresa.

“Para estas Navidades prevemos que habrá un aumento de entre el 5% y el 10% de las ventas de alimentos y también crecerán las compras de productos selectos como el cava o el marisco”, asegura el secretario general del Consejo de Empresas Distribuidoras de Alimentación de Catalunya (CEDAC), Roger Gaspa, que recalca que “la Covid lo puede hacer cambiar todo si el Govern anuncia nuevas restricciones, pero a pesar de todo creemos que puede ser un buen año a nivel de consumo y facturación”. También lanza un mensaje de tranquilidad hacia el consumidor, asegurando que “no está habiendo tal subida de precios como aseguran, El Índice de Precios al Consumo (IPC) general es del 5,5% y el de la alimentación, del 3,3%. Es la mayor diferencia en 15 años”, afirma Gaspa, que añade que su sector “es muy competitivo y el cliente es sensible a los precios, si suben, se va a otro lado, no podemos especular porque lo pagas caro y tenemos los índices de precios más bajos en una década porque se ha ganado en especialización”.

En cambio, otros comerciantes admiten que sí hay subidas notables de precios. Alejandra Ferreira, jefa de la tienda Caprabo de La Seu, asegura que “el cordero, las almejas o las ostras nunca habían estado tan caros”. Su establecimiento lleva semanas recomendando a sus clientes que se adelanten y compren antes de las fiestas.

Los productos más demandados son “la merluza, el rape, las gambas, las ostras y las almejas”. En cuanto a los percebes y las gambas, “evitamos comprar los de Galicia porque están a un precio privativo”.Por otro lado, en la carnicería-charcutería Cal Francesc de Tàrrega afirman que están teniendo muchos pedidos de canalones, “nuestro producto estrella, hemos tenido que cerrar la lista antes”. Añaden que también tienen bastantes de pollos rellenos y apuntan que el precio de la ternera y el cordero se ha disparado y de momento hay menos demanda, aunque creen que aumentará.

Mientras, bonÀrea señala que aunque los costes de la producción ganadera y de la energía han sufrido un fuerte aumento, por ahora puede cubrir los de su producción intentando mantener precios estables. Sobre los productos con más salida, destaca el jamón ibérico, el solomillo, el entrecot, el pollo, el pavo y platos cocinados como pato o cochinillo.En cuanto a las frutas y verduras, el presidente de los mayoristas del mercado central de Lleida, Jordi Gallo, detalla que “la piña, cerezas y alcachofas son los grandes protagonistas de esta época del año” y admite que “el precio de algunos alimentos subió hace unas semanas, pero creemos que se debe a la mayor demanda o a su baja producción”. Eso sí, lamenta que muchos clientes “han cambiado el mercado por las grandes superficies por mera comodidad”.Por otro lado, el presidente de la Federación de Hostelería de Lleida, Josep Castellarnau, indica que “las perspectivas de comidas y cenas de Navidad son buenas, pero con prudencia”.

Reconoce que el grueso de la facturación estas fechas vendrá “gracias a las comidas y cenas familiares, porque la mayoría de encuentros de trabajo se han suspendido por miedo al coronavirus”.

Anulaciones de viajes por la nueva variante de la Covid

Las agencias de viajes han pasado del gozo al pozo. Si en octubre y noviembre no paraban de recibir reservas para Navidad, ahora la mayoría han sido canceladas.

Así lo aseguran los gerentes de las agencias Garola y Aeromon, Roberto Olano y David Valderrama, que atribuyen este descenso “al miedo a la nueva variante de la Covid, las restricciones que hay en otros países y el coste de las pruebas PCR”. El Caribe, las capitales europeas, Canarias y Baleares eran los destinos más demandados para estas fechas.