Rajoy rechaza 'caminos de ruptura' y ve el parador un ejemplo de colaboración

El parador nacional de turismo ubicado en el antiguo convento del Roser fue inaugurado este jueves por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que aprovechó para abogar por la “empatía y el sentido común” frente a los “caminos de ruptura que no llevan a ninguna parte”, en referencia al referéndum previsto para el 1-O, aunque sin nombrarlo.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, inauguró este jueves el parador nacional de Lleida, ubicado en el antiguo convento del Roser de la calle Cavallers, y aprovechó para referirse, sin nombrarlo, al referéndum sobre la independencia de Catalunya que la Generalitat prevé para el 1 de octubre. “Frente a los caminos de ruptura, que no llevan a ninguna parte, apostamos por las vías de la empatía y el sentido común, que son las que nos llevan a todos más lejos y por las que en el futuro va a transitar el mundo”, afirmó.

Rajoy puso el parador como ejemplo de colaboración entre administraciones y abogó por “conectar con los demás frente al absurdo de poner balizas entre nosotros”. “Es una imagen elocuente de lo mucho y muy bueno que podemos hacer juntos, de cómo nos podemos apoyar los unos a los otros y de cómo las mejores apuestas son las que lejos de poner distancia, saben acercarnos”, subrayó.

El presidente del Gobierno afirma que “con el turismo aprendimos a ser más tolerantes en años difíciles”

El presidente del Ejecutivo estuvo acompañado del ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, entre otras autoridades, y a su llegada al Roser el senador de ERC Miquel Àngel Estradé entregó a Rajoy un DVD del documental ‘Las Cloacas de Interior’, un trabajo de investigación sobre las supuestas maniobras del ministerio del Interior contra Catalunya.

Al acto había sido invitado el conseller de Turismo, Santi Vila, pero declinó su presencia por motivos de agenda y el Gobierno de Carles Puigdemont estuvo representado por su delegado en Lleida, Ramón Farré.

Rajoy también incidió en su discurso en que “con el turismo, los españoles aprendimos a modernizarnos y aser más tolerantes en unos años aún difíciles”. Añadió que “el turismo nos ha enseñado como viajeros o anfitriones como esde imporantte abrirse y conectar con otros”.

Destacó que el Estado es líder mundial en turismo junto con Francia y Estados Unidos y, en el caso de Lleida, auguró que el parador contribuirá a mejorar las cifras de turistas de la provincia, que ya aumentaron un 7% el año pasado.

Ros dice que vertebrará el Centro Histórico, el Eix Comercial y la Seu Vella  El alcalde de Lleida, Àngel Ros, agradeció al Gobierno central su “apuesta fuerte por el turismo de Lleida” a través del parador y recordó que Lleida aspira ahora a que la Seu Vella sea declarada patrimonio mundial por la Unesco. Ros destacó que en su día se descartó este monumento y el Castell dels Templers como sede del parador, en favor del Roser, una ubicación mejor para “vertebrar la ciudad y el Barri Antic”. “La rehabilitación del antiguo convento permite vertebrar al Centro Histórico, la Seu y el Eix Comercial y actúa como enlace de elementos que hacen que el atractivo turístico de Lleida sea mucho mayor”. En este sentido, añadió que este equipamiento “posicionará Lleida en el turismo de patrimonio, naturaleza y gastronómico, en el conjunto del turismo de alto valor añadido que tiene nuestro país”. El alcalde anunció también que el parador tendrá una conexión directa con el barrio judío, cuya recuperación estará lista en otoño y una parte quedará visible. Destacó las características arquitectónicas del establecimiento, que se encuentra en las antiguas dependencias de una iglesia y un convento con un claustro de “inspiración aragonesa”.