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Los sindicatos se plantan ante el deterioro de su sede
Dejarán de pagar los gastos de los suministros || Prevén protestas en octubre si el ministerio de Empleo no les da soluciones
Vista del edificio de los sindicatos en avenida Catalunya.
Los sindicatos tienen previsto disolver en octubre la comunidad de usuarios del edificio AISS y dejar de pagar de los suministros y mantenimiento, que ascienden a 120.000 euros anuales, como medida de protesta ante la inacción del ministerio de Empleo frente al grave deterioro del inmueble. “Dijeron que pagarían la parte que dejó de abonar CCOO cuando se marcharon a otro local, pero no lo han hecho. Si ellos no hacen lo que tienen que hacer, no tiene sentido que sigamos pagando. Y si nos cortan la luz o el agua, que la corten, porque ya no podemos hacer otra cosa”, denunció el secretario general de UGT en Lleida, José Luis Aguilà.
El sindicato está pendiente de la respuesta del ministerio a la petición que le hicieron para que puedan ocupar las antiguas instalaciones del INSS en Prat de la Riba, que quedaron vacías con el traslado de esta administración a un nuevo edificio en Cappont, pero no han recibido respuesta, aunque esperan recibir alguna este mes. También está pendiente que les entreguen el informe técnico que el ministerio encargó sobre el estado del edificio. “Sabemos que está terminado, pero no nos lo quieren entregar porque pondrá de manifiesto las graves carencias el edificio”, criticó Aguilà.
El ministerio prometió asumir la parte que dejó de pagar CCOO, pero no lo ha hecho, afirmó UGT
Los sindicatos no descartan otras medidas de protesta, como salir a la calle con las mesas, si el Gobierno no toma medidas. “La situación es insostenible. Daremos este mes de margen, pero si no dicen nada algo que hay que hacer”, añadió el dirigente de UGT. Tanto este sindicato, que es el principal usuario de este edificio, como la CGT, que también ocupa una planta, han denunciado en reiteradas ocasiones el grave deterioro del inmueble, con problemas en sus instalaciones, aislamientos con amianto, filtraciones de agua, salidas de emergencia y ascensores obsoletos, entre otros problemas. Comisiones Obreras ya decidió abandonarlo y alquiló por su cuenta la antigua sede de los Aparejadores, pero los otros sindicatos reclaman que el ministerio les realoje, como es su obligación.
