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TRIBUNALES VEREDICTO

Absuelto el violador leridano juzgado por un crimen en Girona

Considera probado que Antonio García Carbonell estuvo en el lugar de los hechos, pero no que participara en la paliza mortal|| Atribuye el asesinato al otro acusado

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La Audiencia de Girona absolvió ayer al leridano Antonio García Carbonell, que en su día cumplió condena por varias violaciones, de propinar una paliza mortal a una mujer de 76 años en Cabanes, en el Alt Empordà, después de que el jurado popular le declarara no culpable. Se enfrentaba a una petición fiscal de 21 años de prisión y finalmente ha quedado absuelto por este crimen. El jurado consideró que este violador reincidente estuvo en el lugar de los hechos, el 27 de febrero de 2014, pero que no hay pruebas que demuestren que participó directamente en el crimen, por el que señala al otro acusado, Oriol Boyer, al que ven culpable de asesinato con alevosía y ensañamiento, además de un delito de tenencia ilícita de armas.

A García Carbonell, el jurado le absolvió al entender que no tuvo participación en el acto del asesinato al basarse en la declaración de dos testimonios. Uno de ellos dijo que el violador reincidente le confesó que fue con el otro acusado a cometer un robo y que, una vez en Cabanes, se quedó en el coche mientras Boyer agredía a la víctima. El otro testimonio confirmó que los dos acusados habían ido a verle el día antes del crimen para pedirle información para el robo. Por ello, el jurado considera que las únicas pruebas que hay contra García Carbonell son el intento de robo, por el que no le condenan porque ni Fiscaliá ni acusación particular lo han pedido. En este sentido, solo consideran a Boyer como “único culpable de la agresión” al señalar que abordó a la mujer y la agredió “hasta dejarla moribunda. La víctima murió días después en el hospital a causa de las heridas.

Pese a quedar absuelto por este crimen, García Carbonell seguirá en prisión provisional, donde se encuentra acusado de falsificación de moneda. Su abogado pedirá su puesta en libertad porque considera que no hay riesgo de fuga. García Carbonell fue el primer preso en quedar en libertad tras la suspensión de la doctrina Parot. Solo cumplió 18 de los 270 años de condena que se le impuso por violaciones cometidas entre 1991 y 1995. Según la Fiscalía, desde que salió de la cárcel ha hecho del robo de coches su modo de vida.

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