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© La jove acusada de l'agressió (esquerra), ahir abans de declarar al jutjat de guàrdia.
SEGRELa jueza de guardia dejó ayer en libertad con cargos a los dos detenidos por el apuñalamiento a dos chicas el pasado martes en Cappont, pero decretó el ingreso obligatorio en la unidad de Psiquiatría del Santa Maria de uno de ellos, concretamente de la joven de 19 años. Según fuentes cercanas al caso, esta sufre un trastorno límite de la personalidad que comporta una discapacidad de más del 40%. Durante su declaración ante la magistrada, la joven exculpó de lo ocurrido al otro detenido y reconoció ser ella la autora de las lesiones, aunque aseguró que las causó en defensa propia porque temió por su vida. Según su versión de los hechos, antes del apuñalamiento se produjo una discusión entre las dos chicas que resultaron heridas y los acusados. Posteriormente, al parecer las víctimas la increparon y fue cuando se inició una pelea en la que se golpearon y cayeron al suelo. En ese momento, la acusada, que fue examinada ayer por un médico forense, sacó una navaja que llevaba en el bolsillo y apuñaló a las dos chicas, a una en el cuello y a la otra en el tórax. La detenida aseguró en su declaración que no no fue consciente de en qué lugares causó las heridas porque en ese momento no veía nada.
El otro arrestado, un hombre de 29 años, quedó en libertad con cargos tras su declaración con el compromiso de personarse periódicamente en el juzgado. Ante el juez aseguró que él solo intentó separar a las personas que se estaban peleando, algo que habría quedado acreditado por los testigos de la agresión, entre ellos dos taxistas, que aseguraron ante los Mossos d’Esquadra que en ningún momento vieron al acusado golpear a las víctimas. Ambos fueron acusados inicialmente de tentativa de homicidio, aunque todo apunta a que finalmente se tratará de un delito de lesiones.
