El vecino de Alzira (València) acusado de incitar a una niña de Lleida de 9 años a enviarle fotografías suyas desnuda aceptó ayer dos años de prisión tras celebrarse el juicio en la Audiencia Provincial de Lleida. El procesado, abogado de profesión, evitará la cárcel si abona la indemnización de 40.000 euros por los daños morales causados a la víctima, no vuelve a delinquir y se somete a un programa de formación, que determinará la Audiencia en su sentencia.
De esta forma, el acusado admitió que había recibido las fotografías íntimas de la menor, pero no reconoció que supiera que esta tenía menos de 16 años, por lo que la Fiscalía retiró la petición inicial de seis años de prisión al no ver agravante por la corta edad de la víctima. Finalmente, el Ministerio Público solicitó que se le imponga dos años de prisión por corrupción de menores y otros dos años de libertad vigilada.
En su declaración ante el tribunal, el acusado negó los hechos, pero finalmente, para poder reducir la condena, aceptó que había recibido las fotografías y que había contactado con la menor a través de la red social Hangouts. Los hechos ocurrieron en agosto de 2015 y fue la madre de la niña quien encontró las fotografías en su móvil en otra aplicación, Picassa, y denunció los hechos ante los Mossos d’Esquadra. Asimismo, la madre contactó con el acusado a través de la aplicación haciéndose pasar por su hija y este le pidió más fotos. Además, durante el juicio, trascendió que el hombre también envió fotografías suyas íntimas a la menor y que esta se asustó y le bloqueó.
Según declararon ayer varios agentes de los Mossos d’Esquadra, la investigación se centró en identificar el perfil que había recibido las fotografías de la menor y señalaron que en estas “no cabía ninguna duda de que se trataba de una niña”. Sin embargo, las partes (Fiscalía, acusación particular y defensa) llegaron a un acuerdo a mitad del desarrollo de la vista.