MEDICINA ALTERNATIVA
Los médicos se ponen serios
Los preparados homeopáticos se venden en farmacias.
El consejo de los Colegios de Médicos de Catalunya ha elaborado un documento en el que rechaza el uso médico de las terapias complementarias, conocidas como la homeopatía. Argumenta que “actualmente no existen nuevos conocimientos aplicables que no hayan superado un proceso de validación por parte de la comunidad científica ni de organismos oficiales”. El próximo jueves, la junta directiva del Colegio de Médicos de Lleida se reunirá para decidir su posición al respecto.
El documento defiende la titulación académica “oficial del licenciado en Medicina”, ya que “antepone sus criterios científicos al de las terapias alternativas, que aparentan la misma garantía que el grado de Medicina”. Afirma que “todos los tratamientos que no tienen validación científica, se deberán pautar de manera complementaria”.
El Consejo ha elaborado un documento con una serie de puntos en el caso de aplicar la homeopatía
Aún así, especifica que si el médico desea aplicar dichas terapias, porque así lo desea el paciente, “hay que alertarle de que no es una sustitución de ninguna medicación y que deberá informarle de la necesidad de no abandonarla”. El texto también indica de que en el caso de que el profesional “no tenga suficientes conocimientos sobre la homeopatía, deberá derivar el paciente a alguien con experiencia necesaria para garantizar la atención médica de calidad del paciente”.
Además, el Colegio de Médicos rechaza otras terapias complementarias como la Nueva Medicina Germánica (critica la medicina basada en evidencias y promete un muy elevado porcentaje de éxito en la cura del cáncer, así como otra enfermedad); el Método Hamer (similar al anterior, en el que rechaza el uso a tratar el cáncer con quimioterapia y radioterapia); la Bioneuroemoción (niega el origen biológico de las enfermedades y asegura que la cura pasa por resolver los conflictos emocionales) y la dieta milagrosa del PH (aumentar la cantidad de alimentos o productos alcalinos y reducir el consumo de los alimentos o productos ácidos). Por último, el documento asegura que seguirá promoviendo el cumplimiento de las normas profesionales “y sancionado las prácticas contrarias”.
