Aumentan un 31% los delitos contra el orden público en el último año

El contexto político y social de los últimos doce meses ha provocado que las actuaciones de los Mossos d’Esquadra se disparen en la ciudad de Lleida. Solo en el primer semestre de 2018 se ha practicado 250 por las alrededor de 200 que se practican “en un año normal”, según apuntó el delegado del Govern en Lleida, Ramon Farré, que añadió que “ha sido un notable aumento de la carga laboral”. Destacan, por ejemplo, las infracciones penales por delitos contra el orden público, que han pasado de 57 a 75 entre julio del 2017 a junio del 2018, respecto al mismo periodo de 2016 a 2017, un 31% más de casos. “Si hay más manifestaciones, aumenta la conflictividad”, remarcó el alcalde de Lleida, Àngel Ros. Estas cifras se dieron a conocer ayer al mediodía tras la celebración de la junta local de Seguridad, en la que participaron Guardia Urbana, Mossos d’Esquadra, Guardia Civil y Policía Nacional.

Por otra parte, también han repuntado un 5,6% las infracciones delictivas (delitos y delitos leves), con 10.132 casos, rompiendo la tendencia de los últimos dos ejercicios. De esta forma, los delitos contra las personas se han incrementado un 4,1% (1.463 hechos) y los delitos contra el patrimonio un 6,2% (7.995 hechos). Destacan los hurtos, con 3.317 denuncias, lo que supone una media de nueve casos por día.

En cambio, la tendencia es positiva en cuanto a los accidentes de tráfico. En el primer semestre del año se ha producido un descenso del 33% del número de heridos graves y del 10% de los atropellos. El alcalde explicó que “creemos que la principal causa es la reducción de la velocidad de los vehículos por los radares, que han pasado de multar de los 65 km/h a 60 km/h y los semáforos foto-rojo”.