Urbanismo entierra grandes proyectos que ve inviables como las pistas de Espui

La Generalitat ha apostado por nuevas fórmulas para evitar el desarrollo de sectores urbanísticos “no sostenibles” de 24 municipios del Pirineo, entre los que destacan las pistas de esquí de La Vall Fosca o las de Llessui. Son proyectos urbanísticos que provienen de planeamientos antiguos que hoy en día son inviables y no se plantea su ejecución.

La comisión de Urbanismo del Pirineo dio luz verde ayer a un plan director urbanístico (PDU) que abarcará toda Catalunya y que prevé actualizar y racionalizar todos los proyectos urbanísticos que se idearon hace dos décadas y que hoy en día son inviables e insostenibles, según sostuvo el secretario de Hábitat Urbano y Territorio, Agustí Serra. Esta revisión servirá para enterrar “errores urbanísticos y barbaridades del pasado” como el complejo de la Vall Fosca procedente de un planeamiento antiguo, que no se ha llegado a desarrollar o ha quedado a medias y que preveía la construcción de 1.200 viviendas en Espui y la creación de unas pistas de esquí. En el caso del Pirineo se revisarán 120 sectores o planeamientos de 24 municipios y en 73 sectores de 20 de estos municipios ya se ha suspendido la tramitación de planeamientos y las licencias de edificación hasta que finalice la redacción del plan, que se estima de un año, prorrogable a otro más. Estos proyectos se consideran especialmente “insostenibles” con la realidad actual por factores como el riesgo de inundabilildad, estar situados en terrenos de fuertes pendientes o incumplir el planeamiento territorial, además el fuerte impacto ambiental que suponen para el territorio. Serra destacó que se analizarán todos los sectores y se propondrá “la estrategia más adecuada”, que puede pasar por su desclasificación, por la reducción del ámbito a urbanizar o por el cambio de modelo”. Cada estrategia se traducirá legalmente en normas, directrices o recomendaciones que los municipios deberán cumplir. Asimismo, destacó que el plan se irá desplegando por los distintos ámbitos territoriales y después del Pirineo le seguirán las comarcas de Girona. “El país no puede tener estos modelos irrealizables que no respetan límites de crecimiento”, dijo Serrá.

El Pirineo y la costa, con más "errores"

Algunos de los sectores o proyectos urbanísticos encallados que serán analizados, revisados o anulados por la nueva directriz urbanística son la antigua estación de esquí de Llessuí, con un 95% de su ámbito situado en pendientes superiores al 20%; el del municipio de la Vall de Cardós, en el núcleo de Ainet de Cardós al encontrarse el 47% de la superfície del sector en zona inundable; el del municipio de Salàs de Pallars al que el plan territorial parcial del Pirineo le asigna un crecimiento máximo del 30%, pero el planeamiento vigente prevé un crecimiento de hasta el 188%, y el plan de Espot que inicialmente permitía construir en una superficie de 79 hectáreas a pie de pistas con reserva de superficie para pisos sociales entre otras iniciativas. Serra apuntó que estos son algunos de los casos con más irregularidades y que se crearon durante los años de crecimiento económico previos a la crisis, que años después frenó su ejecución. Precisamente este tipo de proyectos con “errores urbanísticos” se centran en las cinco comarcas del Pirineo, la Alta Ribagorça, Jussà, Sobirà, Alt Urgell y Cerdanya, y también en las comarcas del litoral. En la actualidad, solo quedan pendientes de urbanizar sectores “poco atractivos por su ubicación, en municipios con poco crecimiento, o en terrenos poco aptos”, dijo. Añadió que la ley de Urbanismo de Catalunya aprobada en 2002 reforzó los criterios de desarrollo sostenible y, “todo lo aprobado desde entonces ya recoge estos criterios”, dijo. No obstante, de los 68 municipios del ámbito del Pirineo, aún hay 26 que no se han adaptado al planeamiento territorial, y de estos, 16 tampoco están adaptados a la ley de Urbanismo. Según Serra la actualización de los planteamientos suele ser un proceso largo y dificultoso para los municipios.

Luz verde a la ampliación de un camping en Vall de Cardós La comisión de Urbanismo del Pirineo celebrabada ayer en Tremp dio luz verde al plan especial urbanístico de ordenación y mejora del camping La Borda de Pubill en el municipio de la Vall de Cardós. El secretario de Hàbitat Urbano y Territorio, Agustí Serra, destacó que precisamente este equipamiento ha previsto una ampliación que no supera el 50% de su superficie y de plazas actuales, por lo que no “está afectado por la redacción del plan director urbanístico de campings”, dijo. En este sentido, Serra señaló que el plan de campings establecerá las condiciones para implantar nuevos campings y ampliar los ya existentes. En Lleida, se han paralizado proyectos para siete nuevos campings.