La casa de los horrores

Un bloque de pisos sociales de la Generalitat situado en la plaza Josep Solans, cerca del Parador del Roser, se ha convertido desde hace más de un año en un lugar de cobijo para okupas, drogadictos y personas que cometen actos vandálicos, según denuncian los vecinos que viven en él. Además, desde hace unas semanas, varias personas se cuelan por el tejado a través de un agujero para entrar en el bloque, donde los inquilinos afirman que se drogan, duermen, hacen sus necesidades, generan ruido, amenazan a los vecinos y cometen todo tipo de actos vandálicos. También se cuelan por el portal porque la cerradura está rota. “Llevamos demasiado tiempo pidiendo ayuda a la Agència Catalana de l’Habitatge, pero no nos hacen caso. Entran y salen tanto por la puerta como por el techo”, manifestaron, aunque admitieron que no saben cómo llegan al tejado. También explicaron que venden droga en su portal.

Y es que una de las inquilinas explicó que está “harta” de esta situación. Denuncia que faltan al respeto, hacen sus necesidades en el ascensor, y que gritan por las noches y no dejan descansar. “Me tengo que medicar por ansiedad y no quiero pedir otro piso social porque sé que la mayoría están en barrios degradados y que sucedería algo similar”, manifestó.

La Agència Catalana de l’Habitatge dice que se ocupa de los pisos y que el resto “es cuestión policial”

El edificio tiene 8 viviendas, siete son de la Agència Catalana de l’Habitatge y la otra de la Empresa Municipal de Urbanismo (EMU) y, actualmente, en cuatro viven familias con un contrato, dos están okupadas y en las mismas hay pendientes una orden de desahucio y dos están tapiadas, una de las cuales ya se ha adjudicado a una familia.

Fuentes de la Generalitat afirmaron que “ya nos encargamos de desahuciar a los okupas a través de la justicia y tapiamos los que están vacíos para evitar que vuelvan a entrar”. Sin embargo, respecto a la convivencia en el bloque, apuntaron que “es una cuestión policial”, por lo que recomendaron a los vecinos poner las denuncias pertinentes, algo que estos han dejado de hacer porque afirman “que no sirve de nada”.

La Generalitat admite que tiene 9 pisos okupados en Lleida La Agència de l’Habitatge de Catalunya tiene siete viviendas okupadas en la ciudad de Lleida, una en La Seu d’Urgell y otra en Artesa de Segre, según una respuesta parlamentaria del conseller de Territori, Damià Calvet. Añade que el total de pisos de titularidad de la Generalitat que están okupados en Catalunya son 417 y remarca que “no consta que en ninguno de ellos se desarrollen actividades ilegales”. Asimismo, indica que se han iniciado los correspondientes procedimientos judiciales de desahucio. En este sentido hace semanas la PAH ocupó las dependencias de la Agència d’Habitatge de la Generalitat en la capital para protestar contra el desalojo frustrado de una familia que okupaba un piso de la Generalitat en los bloques Juan Carlos. El desahucio se aplazó, pero la familia optó por dejar la vivienda por su cuenta. La Generalitat detalla también que desde 2015 hasta la actualidad ha adquirido 1.101 viviendas en 76 municipios para destinarlas a familias vulnerables con un alquiler social acorde a sus ingresos. Al respecto, señala que la media de renta mensual es de 64,49 euros. Añade que tiene actualmente 775 viviendas desocupadas “en diversos procedimientos previos a su entrega” y asegura que el plazo de entrega es de unos sesenta días.