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Los hospitales Arnau y Santa Maria de Lleida limitan visitas a enfermos y acceso a las consultas

Solo permiten un acompañante por paciente ingresado sin coronavirus || Los que van al especialista solo pueden entrar en el centro cuando falten 15 minutos

Las salas de espera garantizan el distanciamiento social entre los pacientes.

Las salas de espera garantizan el distanciamiento social entre los pacientes.ICS LLEIDA

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Los hospitales Arnau de Vilanova y Santa Maria ya han empezado a recuperar la actividad paralizada por el coronavirus, como las consultas externas presenciales, de las que se han tenido que reprogramar 12.848. De hecho, el Arnau ya las reactivó la semana pasada y el Santa Maria, ayer. Sin embargo, esta vuelta a la nueva normalidad asistencial no será como antes y se han establecido una serie de normas y protocolos.

Así, el acceso a los dos hospitales será por una única puerta -en el Arnau es la del vestíbulo principal, y la del Santa Maria, la que está junto a la cafetería-, donde los vehículos podrán dejar o recoger al paciente. Cada usuario deberá ir con mascarilla y deberá lavarse las manos al entrar y al salir.

Para las consultas externas, solo se podrá acceder al hospital 15 minutos antes de la visita y, si se llega con más antelación, se deberá esperar fuera. Cuando el usuario pueda entrar, deberá pasar la tarjeta sanitaria en las máquinas de validación del vestíbulo para acceder a la sala de espera correspondiente. Hay que tener en cuenta que el acompañamiento de pacientes está restringido a una sola persona y solo en el caso de que sea estrictamente necesario, como por ejemplo pacientes de edad avanzada que sean dependientes, otros con movilidad reducida o niños.

Una vez en la sala de espera hay que respetar la distancia de seguridad y solo es posible sentarse en los asientos marcados en verde.

El coronavirus también ha comportado cambios en las visitas a los pacientes que están hospitalizados. Así, si se trata de afectados por la Covid, solo es posible el acceso de un familiar en algunas situaciones, según el criterio del médico.

En el caso de pacientes hospitalizados que no sean positivos de Covid-19, se permitirá un acompañante por paciente, preferiblemente siempre la misma persona y siguiendo las indicaciones generales de acceso. Antes de la pandemia, estaba permitido dos visitantes y era habitual que en algunas ocasiones hubiera más. Aun así, ambos hospitales posibilitan la comunicación entre pacientes y familiares mediante videollamadas.

El sistema sanitario se irá readaptando poco a poco, pero seguirá en fase de prealerta por un posible rebrote durante el desconfinamiento y, por ejemplo, algunos especialistas continuarán haciendo ciertas visitas por teléfono y poco a poco las presenciales irán imponiéndose.

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