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El pabellón Onze de Setembre ya es un hospital, aunque no abrirá hasta otoño

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El el jefe del proyecto del SEM, Lluís de la Torre; el gerente, Antoni Encinas;  y el delegado en Lleida, Joan Pérez, ayer en el pabellón.

El el jefe del proyecto del SEM, Lluís de la Torre; el gerente, Antoni Encinas; y el delegado en Lleida, Joan Pérez, ayer en el pabellón.ITMAR FABREGAT

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El Arnau de Vilanova gestiona desde hoy el pabellón Onze de Setembre. Con 70 camas, el equivalente a dos plantas de hospital, el equipamiento está pensado para afrontar la segunda oleada de positivos, prevista para octubre. Las comarcas de Lleida registraron ayer 87 nuevos casos y Salud constata que la curva se allana.

El hospital Arnau de Vilanova de Lleida gestiona desde hoy el pabellón Onze de Setembe, que el Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM) ha adecuado como hospital para pacientes con coronavirus. Se trata de un espacio con 70 camas, que sería el equivalente a dos plantas de hospitalizados en el Arnau, y estará operativo como mínimo hasta marzo. Según el gerente del SEM, Antoni Encinas, el espacio se ha hecho “de cara a la oleada de casos prevista para octubre, ya que agosto y parte de septiembre serán tranquilos”. Asegura que “estas semanas hemos tenido más humo que fuego, pero se prevé que el virus golpee fuerte con la bajada de temperaturas, por lo que hemos sido precavidos y hemos puesto todos los medios para afrontar lo que vendrá en otoño”. Para Encinas “en verano ha habido más contagios pero de gente joven, con sintomatología leve o asintomáticos, lo que comporta que haya menos ingresados, por lo que ahora la situación hospitalaria no es preocupante”. Este escenario de más casos pero menos graves es con el que deberemos convivir estas próximas semanas “y asumir que a medida que volvamos a la actividad habrá rebrotes”. Sobre este último aspecto, para el gerente del SEM “es inevitable que haya rebrotes tanto en las aulas como en los puestos de trabajo, pero lo importante a nivel asistencial es que estos contagiados no sean personas vulnerables”.

El número de hospitalizados en los centros públicos de la provincia (ahora Salud no contabiliza a los derivados a centros privados y hoteles hospitalizados) bajó ayer de los 107 notificados el viernes a los 92, de los cuales 90 se encuentran en hospitales de la región sanitaria de Lleida. No obstante, los ingresados en cuidados intensivos siguen siendo 19. En lo que respecta al número de nuevos positivos, Salud notificó ayer otros 87 casos, mientras que la cifra de fallecidos se mantiene en 271. Actualmente, en la provincia los contagiados desde el inicio de la pandemia son 8.494 de los cuales 7.407 se han contabilizado en el llano. Asimismo, desde el mes de marzo se han practicado 57.833 pruebas PCR.

El SEM desmontará entre hoy y mañana la carpa del hospital El gerent del SEM, Antoni Encinas, aseguró que “entre hoy y mañana” se desmontará la carpa instalada delante del hospital Arnau de Vilanova. El motivo de esta decisión es el poco rendimiento que se ha dado a la instalación, ya que “provocó un efecto disuasorio entre la población”. Según Encinas, “antes de montar la carpa los pacientes con síntomas de coronavirus y otras dolencias no relacionadas con la pandemia llenaban la sala de urgencias y se aumentaba el riesgo de contagio”. Precisamente, la carpa se instaló para hacer el cribaje de casos y evitar saturar las instalaciones del Arnau. No obstante, “la mayoría de pacientes dejaron de ir al hospital para ser atendidos en los Centros de Atención Primaria (CAP), lo que ha provocado que ahora mismo la carpa no funcione, porque no acude tanta gente”. Un caso muy distinto es el de la carpa instalada delante del CUAP de Prat de la Riba, que está a pleno rendimiento y no se desmontará por ahora. “En este caso sí que hay actividad porque es donde se hacen las pruebas y los primeros tratamientos contra el coronavirus, por lo que tiene una función muy útil y seguirá todo el tiempo que nos lo pidan”, concluyó Encinas. La carpa del Arnau se instaló el 3 de julio, un día antes de que se decretara el cierre perimetral de la comarca del Segrià, mientras que la de Prat de la Riba se colocó el 11 de julio, poco antes de que se decretara el confinamiento en Lleida y seis municipios del Baix Segre.

El el jefe del proyecto del SEM, Lluís de la Torre; el gerente, Antoni Encinas;  y el delegado en Lleida, Joan Pérez, ayer en el pabellón.

El el jefe del proyecto del SEM, Lluís de la Torre; el gerente, Antoni Encinas; y el delegado en Lleida, Joan Pérez, ayer en el pabellón.ITMAR FABREGAT

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