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La Guardia Urbana de Lleida tiene 31 nuevos agentes

Miquel Pueyo recibe los 31 nuevos y nuevas agentes de la Guardia Urbana de Lleida y asegura que hacen que ahora el cuerpo “refleje más la diversidad de la ciudad"

Presa de possessió de 31 nous agents de la Guàrida Urbana de Lleida

ITMAR FABREGAT

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La Guardia Urbana de Lleida cuenta desde hoy con 230 efectivos después de la toma de posesión de 31 nuevos y nuevas agentes a las cuales se ha celebrado en el Baluarte de la Reina de la Seu Vella. Once de los policías que se incorporan provienen de otros cuerpos de seguridad a través de un proceso de movilidad administrativa.

El alcalde Miquel Pueyo ha calificado el acto de hoy de “histórico”, ya que representa la renovación de un 15 por ciento de la plantilla de cuerpo de la Guardia Urbana “en un año tan difícil y tan complicado de gestión en muchos otros aspectos”, ha dicho. El Paer en Cap ha asegurado que la Guardia Urbana de Lleida “se enorgullece de su proximidad a la ciudadanía, de hacer de las tareas de diálogo, mediación, auxilio y protección civil una de sus principales razones de ser y que la hacen ser bien valorada por los leridanos y leridanas”.

Asimismo, ha animado a los nuevos policías “a no perder nunca de vista este ideal del servicio público por delante de todo y alejar tanto como sea posible toda tentación de actuar con altivez, condescendencia o superioridad”. El cuerpo de la Guardia Urbana de Lleida es el cuarto más antiguo del Estado español, por detrás de los de Madrid, Barcelona y Bilbao.

A la toma de posesión han asistido los tenientes de alcalde Toni Postius y Sandra Castro y el concejal Joan Ramon Castro en representación del Gobierno de la Paeria; el jefe de la oposición, Fèlix Larrosa, y el concejal y concejalas Cristina Morón, Ángeles Ribes y Xavier Palau. Por parte del cuerpo de Mossos d'Esquadra han estado presentes Jordi Dalmau Florejachs, subjefe de la región policial de Ponent, y Xavier Ribelles, jefe del Área Básica Policial de Segrià, Garrigues y Pla d'Urgell.

Al empezar el acto, Miquel Pueyo ha pasado revista a la formación de la Guardia Urbana y, acto seguido, se han entregado las placas policiales a los nuevos agentes que han sido acompañados de sus familias. Pueyo los ha animado a ejercer el nuevo trabajo con “honradez, cortesía, prudencia, energía y carácter”, citando un acta de selección de personal del mismo cuerpo del año 1911. En su discurso, Pueyo ha agradecido los servicios y la dedicación a los y las agentes que se han jubilado últimamente: “La vida de un cuerpo de policía es, también y sobre todo, la suma de las vidas, de las historias, de las ilusiones, de los momentos no tan buenos y de los momentos difíciles de una serie de personas, hombres y mujeres, que asumís un compromiso que va más allá, que es mucho más intenso, arriesgado y profundo que cualquier otro de los compromisos que se pueda asumir en la administración pública”. El Paer en Cap  ha señalado que la progresiva incorporación de mujeres en el cuerpo de la Guardia Urbana “es extremadamente importante, natural y deseable”. El alcalde ha concluido su parlamento remarcando que, en el contexto actual, aparte de servir, proteger y salvaguardar la vida y la salud, hace falta también salvaguardar, resistir y reanudar la actividad económica, comercial, industrial y laboral cotidiana.

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