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EDUCACIÓN ENERGÍAS RENOVABLES

El Gili i Gaya, centro pionero en abastecerse con energía solar

Ha instalado 60 placas en la cubierta de su pabellón que generarán casi la mitad de la electricidad que consume en un año || También las usará con fines educativos

La directora del centro y el secretario y tecnólogo del Gili i Gaya, en la cubierta con las placas solares.

La directora del centro y el secretario y tecnólogo del Gili i Gaya, en la cubierta con las placas solares.AMADO FORROLLA

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El instituto Samuel Gili i Gaya es de los primeros institutos de la provincia que, desde este mes, produce buena parte de la electricidad que necesita. Una meta que ha logrado gracias a la instalación de 60 placas fotovoltaicas que generan 400 watios cada una y que están situadas en el tejado de su pabellón.

Según explicó la directora del centro, Marina Castellà, “la instalación de las placas fue una idea que surgió del propio centro y en verano se empezó a colocarlas y testearlas. Somos el único centro de Lleida que tiene un equipamiento de este tipo tan grande”, recalcó la directora.

Además de las placas solares, en el vestíbulo del centro hay un monitor que muestra cuanta electricidad producen las placas cada día y qué porcentaje supone del total del gasto energético del instituto.

“Ha sido una actuación que se ha financiado con presupuestos de varios años y no se amortizará hasta dentro de seis o siete, pero considero que esto nos pone como un ejemplo en lo que se refiere al uso de las energías renovables”, dijo el secretario y tecnólogo del centro, Pere Pifarré.

“Calculamos que estas instalación generará una media de una tercera parte de la energía que necesita el instituto y en los meses de verano incluso producirá más de la que necesitamos, por lo que abastecerá a la red de la ciudad”, señaló Pifarré. Según los estudios del propio centro, la instalación generará el 42% de la energía que necesita en un año. Pero además del ahorro energético que supone para el instituto, estas sesenta placas solares también tendrán una finalidad educativa.

“Hemos vallado el tejado para que los alumnos puedan subir aquí a ver cómo funciona la energía solar y a partir de allí hacer trabajos sobre las energías renovables, es por ello que estamos muy orgullosos de esta doble función”, concluyó Pifarré.

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