Piensan en los demás

Inmediatamente después de la pantomima de Jugando con las estrellas que comentábamos ayer, aparece otra en La 1 de TVE titulada El árbol de los deseos completando el pack del 2x1 de espacios con niños dentro. Este bienintencionado programa, que bordea peligrosamente la madrugada con menores en sus contenidos, tiene al menos un valor pedagógico añadido. Normalmente, cuando hay niños de por medio, estamos demasiados acostumbrados a oír el “yo,yo, yo” o “quiero, quiero, quiero”. Aquí no ocurre eso. Los niños, por una vez y ojalá sirva de precedente, piensan en los demás. Edu Soto, cuyo desparpajo es el mejor activo de este inocuo programa, se pasea por los colegios y pide a los niños que escriban un deseo y lo cuelguen de un árbol. Luego es de suponer que un equipo de expertos selecciona los mejores y se hacen a la realidad. ¡Vaya, un Sorpresa, Sorpresa en versión infantil. Hemos visto deseos emotivos: que los padres puedan hacer el viaje de novios que nunca pudieron, asistir al Bernabéu, viajar a ver a su lejana abuela o que su madre no trabaje tanto...