Manu, ¿qué te hemos hecho?

Permítanme que insista. No sabemos a ciencia cierta cuando el ínclito Manu Sánchez vio la luz y se cayó del caballo para convertirse en el azote del independentismo catalán, adelantando por la derecha, que ya es decir, a la mismísima Susanna Griso. Pero lo cierto es que cada vez que, aunque sea remotamente, el procés se mezcla con el deporte le entra una excitación, un desasosiego que le transforma en un imparable ariete. La última, ayer mismo, en el informativo del mediodía en Antena 3. Desde el césped del Olímpico de Roma, en la previa del Roma-Barça, la gran noticia para abrir su sección de deportes no era otra que un grupo de seguidores azulgranas, desplazados al partido, desplegaron en una céntrica plaza romana una pancarta y un gigantesco lazo amarillo, pidiendo la libertad de los independentistas encarcelados. A su juicio, intolerable, imperdonable y digno de la más cruel de las sanciones y con el Barça como consentidor. Para reforzar su tesis incluyó imágenes de la previa de la final de Champions del 2009, al grito de “!qué pena, cómo han cambiado los culés!”. De chiste, vaya.